EPA

Castilla y León empezó este año con casi 26.000 ocupados más

El paro baja un 13,7 por ciento en 2022 y deja a la Comunidad por debajo de los cien mil desempleados

Un camarero sirve varias bebidas en una terraza
Un camarero sirve varias bebidas en una terrazaDavid Arquimbau SintesAgencia EFE

Buenas noticias en Castilla y León en materia laboral. Y es que la Comunidad comenzaba el presente año con cerca de 26.000 ocupados más, en concreto, 25.700, hasta superar en catorce mil el millón de personas trabajando en estos momentos, según la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al último trimestre de 2022 que se ha conocido este jueves.

Además, la Región cerraba el 2022 con 15.600 parados menos, que deja por debajo de los cien mil el número de desempleados, concretamente en 98.300, con una tasa de paro del 8,83 por ciento, un punto y medio menos que al inicio del ejercicio, y más de cuatro puntos por debajo de la media nacional.

La tasa de paro masculina es menor que la femenina, un 7,79 por un 10,02 por ciento, respectivamente.

Esta bajada es muy superior a la registrada en el conjunto de España, donde en ese mismo periodo cayó un 2,57 por ciento (79.900), hasta los 3,02 millones de parados.

Con estos datos en la mano, Castilla y León encadena tres descensos intertrimestrales tras alcanzar el 11,1 por ciento entre enero y marzo del pasado año y acaba el 2022 con la tercera menor tasa de paro del conjunto autonómico, en una clasificación que lideraron La Rioja (8,60) y el País Vasco (8,66.

Durante el cuarto trimestre del pasado año, un total de 1.600 personas salieron de las listas del paro en Castilla y León, aunque también perdió 7.700 ocupados.

Mientras que a nivel nacional, el mercado laboral arrancaba este 2023 con 20,46 millones de ocupados, 278.900 más que al inicio del pasado año, con un cuarto trimestre negativo en el que el empleo cayó en 81.900, el mayor descenso para este periodo desde 2013.

Si bien, no todo es oro lo que reluce y los datos referente a la tasa de actividad es mejorable, ya que esta se situó en Castilla y León en 54,74 por ciento (58.52 en España), la cuarta más baja del país, solo por detrás de Asturias.

Por provincias, cabe señalar que la tasa de paro subió especialmente en Soria y Zamora, las dos más despobladas, lo que no es buena noticia. En tierras sorianas lo hizo del 6,99 al 7,87 por ciento mientras que en territorio zamorano se pasó del 8,87 al 14,09 por ciento de tasa de paro. Además, en esas dos provincias también fueron las únicas con menos ocupados que hace un año, con 4.900 y 900 menos en cada caso, y recortes del 7,08 y el 2,18 por ciento en términos porcentuales.

Por contra, esta tasa se redujo en las siete provincias restantes hasta situarse en el 12 por ciento en Ávila y el 10,4 en Salamanca, las únicas que se encuentran a dos dígitos.

Para concluir, la tasa de actividad más alta se registra en Burgos con un 58,75 por ciento y en cuanto a sexos, había 52.300 mujeres buscando empleo al inicio de este año.

Reacciones

Nada más conocerse estos datos de la EPA han comenzado las reacciones a los mismos. La primera ha sido del sindicato UGT, en boca de su secretario de Acción Sindical y Diálogo Social, Raúl Santa Eufemia, que hace hincapié en los desequilibrios entre provincias. “Para nosotros este es el mayor fracaso”, apunta, a la vez que explica que esto se debe a las “políticas erráticas” del PP durante tres décadas.

Y aprovecha para pedir a la Junta que “regrese” a las mesas de negociación para crear un plan de políticas activas de empleo.

Además, Santa Eufemia quita hierro a la evolución al alza del empleo en este último trimestre y de todo el año pasado, aunque al menos dice que es positiva, pero achaca esta buena tendencia al buen hacer de la reforma laboral.

Para la Junta el dato más importante es el número de activos, que asciende a 1.112.600, más de diez mil personas más que el mismo trimestre de 2021, un dato que supone el mejor interanual de los últimos tres años. Para el secretario general de la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, Alberto Díaz, estos datos demuestran que el mercado laboral tiene capacidad de absorción de la incorporación de nuevos activos, aunque avanzaba que la próxima semana se conocerá el paro registrado en enero, que es un mes en el que históricamente se observa un aumento de los demandantes de empleo. “En esos datos veremos si el Gobierno de España cumple y facilita el número de contratos fijos-discontinuos tal y como ha comprometido recientemente y que vienen alterando mes a mes los datos del paro en el marco del sistema nacional de empleo, como venimos manifestando reiteradamente junto a otras Comunidades”, finalizaba.

Para la patronal CEOE, los datos de la EPA no reflejan aún el menor dinamismo de la actividad económica en la comunidad, y advierte de las pésimas cifras del Indice de Producción Industrial (IPI), de empresas inscritas a la Seguridad Social, así como del crecimiento interanual del PIB “por debajo de la media nacional”, a lo que se une una “dramática situación” de pérdida de población.

En opinión de Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León, los datos conocidos hoy deben ser analizados “con máxima prudencia, dada la incertidumbre económica derivada del conflicto bélico en Ucrania, la inflación y el encarecimiento generalizado de los costes de producción, que están limitando seriamente la viabilidad de la actividad empresarial”.

Y ante esta situación, la CEOE de Castilla y León recomienda priorizar el mantenimiento y la creación de empleo, “adquiriendo especial incidencia la flexibilidad y la contención de los costes laborales y de producción”.