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«Zoolander»: El «selfie» del año

Vuelve 15 años después con Ben Stiller, Owen Wilson, Will Ferrell, Penélope Cruz, la participación de rostros conocidos de la moda y el «asesinato» de Justin Bieber

«Zoolander»: El «selfie» del año
«Zoolander»: El «selfie» del añolarazon

Vuelve 15 años después con Ben Stiller, Owen Wilson, Will Ferrell, Penélope Cruz, la participación de rostros conocidos de la moda y el «asesinato» de Justin Bieber

Un escaparate de Valentino en Roma, la Semana de la Moda de París, las pasarelas de Nueva York... «Zoolander Nº2» ha recorrido el mundo antes de su estreno hoy en las salas, 15 años después del lanzamiento de la primera parte. Ésta «al principio no funcionó pero a lo largo de los años se desarrolló entre el público la opinión de que era una película de culto», comenta Owen Wilson, quien interpreta a Hansel. Él y Derek Zoolander, en cuya piel está Ben Stiller, son los modelos masculinos más famosos de la historia del cine, y aunque parodian la industria de la moda, Stiller asegura que «a la gente de esta profesión les encantó el filme y lo disfrutaron porque captura la ridiculez de su universo sin ser ofensiva». Tanto gustó que Anna Wintour, editora jefe de «Vogue» e icono de la moda, fue la primera en interesarse por una secuela: «Se me había acercado otras veces para preguntarme por qué no hacía una segunda parte. Fue la primera persona que llamé al retomar el proyecto. Me prestó una gran ayuda y me abrió muchas puertas porque es una figura muy influyente». Pero «Zoolander» no sentó bien a todos los profesionales de la moda. Según apunta Wilson, «en el rodaje de la primera habían algunos modelos masculinos que se iban a ir porque no se les estaba retratando de una manera respetuosa. Cuando les pagamos seguro que siguieron tan contentos».

Esta vez Derek Zoolander emprende la búsqueda de su hijo junto a Hansel y Valentina, una agente de la Interpol encarnada por Penélope Cruz. Stiller, quien también es el director y el guionista, admite que «Cruz fue la actriz que tuve en mente desde el principio, no ha hecho tanta comedia en Estados Unidos y me parecía bien darle esa oportunidad». Siguiendo el rastro del pequeño de los Zoolander, Derek se vuelve a cruzar con el diseñador más malvado, Mugatu. No obstante, su intérprete, Will Ferrell, confiesa que «no tengo ningún sentido de la moda. Mi mujer me pregunta si voy a salir vestido así a la calle. Ese mundo es muy divertido de retratar, es frívolo. Ves esos trajes artísticos y comprendes que se necesita destreza, pero en el mismo desfile parece que algunos van disfrazados o extraterrestres». Eso es lo que parece Mugatu, pero Ferrell confiesa que para la secuela Stiller le ha engañado menos con el estilismo: «En la primera el pelo de mi personaje era el mío y me lo teñí hasta tres veces, esta vez se trata de una peluca».

Ferrell, quien también critica la ausencia de nominados de raza negra en los Oscar, asegura que «el debate sobre la diversidad ha calado en la Academia. La presidenta es afroamericana y está dando pasos para ajustar la composición de los votantes, de los cuales el 93% son blancos y con una edad media que supera los 65 años según una noticia que leí el otro día en «Los Angeles Times». Por otra parte, para Ferrell «la comedia es una forma de arte que no tiene el respeto que merece». Y añade que, paradójicamente, «los que más respetan nuestro trabajo son los actores dramáticos». En «Zoolander Nº2» una buena dosis de humor y ficción recae en la «muerte» de Justin Bieber. Para muchos sólo por verla vale la pena pagar una entrada.

Precisamente, Bieber es uno de los componentes de la nueva cultura juvenil que más ha potenciado el fenómeno «selfie», que, ya en 2001, iniciaba Derek Zoolander. Dice Stiller que «el mundo ha cambiado y se acerca mucho a lo que refleja la primera película, la gente documenta su vida todo el tiempo. Recuerdo la época en la que me pedían autógrafos, que es algo que ahora no pasa, me hace hasta ilusión que me reconozcan y me pidan uno, es como que te escriban una carta». Y recuerda Owen Wilson que «antes pedir autógrafos se consideraba algo intrusivo, actualmente es un gesto muy educado».

Muchos son los cameos de «Zoolander Nº2», desde Kim Kardashian a Marc Jacobs, Kate Moss o Cara Delevingne, pero sin duda el más llamativo es el de Benedict Cumberbatch (en la imagen). Su papel es el de un modelo andrógino llamado «Todo», palabra que también usa para definir su género. «Todo es todo», responde cuando Derek Zoolander le pregunta: «¿Eres un modelo masculino o femenino?». Además, Hansel añade: «Creo que lo que te pregunta es si tienes un perrito caliente o un bollo». Para el colectivo LGTB dirigirse de esta manera al personaje representa una burla tanto para las personas transexuales como las andróginas. Por ello, cuando dicha parte de la película fue incluida en el tráiler, emprendieron una campaña en internet que promovía el boicot a la cinta.