Podemos, C’s y PSOE necesitan 162.000 millones para sus programas laborales

Emplear a los 3,5 millones de parados que propugna Podemos cuesta 140.000 millones. Las propuestas del PSOE tienen un sobrecoste para el Estado de alrededor de 16.000 millones.

La lucha contra el desempleo será una de las armas electorales de los cuatro principales partidos que está previsto que lideren las votaciones en los comicios autonómicos y generales: Partido Popular, PSOE, Podemos y Ciudadanos. En un país que corre el riesgo de convertir a varios millones de parados en estructurales, las propuestas contra el paro movilizarán muchos votos, porque nadie considerará su coste real. Sus medidas necesitarían de un gasto adicional de 162.000 millones de euros, el 15% del PIB.

De los cuatro modelos que encontramos, los más extremos son los de Podemos, especialmente, y el del PSOE. Ambos partidos apuestan por reforzar el empleo a través del gasto público, una medida que, en el caso del grupo que lidera Pablo Iglesias, dispararía el gasto público desde el 44% hasta el 57% del PIB, lo que se traduciría en 140.000 millones de euros más, que los contribuyentes tendrían que pagar. El partido que dirige Pedro Sánchez centra sus mensajes en derogar la reforma laboral del PP y en redactar un nuevo Estatuto de los Trabajadores.

En el lado contrario figuran modelos más liberales, como el de Ciudadanos, que propone el contrato único, la liberalización del sistema de gestión de los fondos de formación y un cheque de 1.200 euros para aquellos parados que deseen aumentar su educación.

El estatalismo de Podemos

De esta forma, encontramos modelos laborales como el del partido que lidera Pablo Iglesias, que en su modelo económico propone «garantizar un empleo público a los parados». Esta solución, con la que, según Podemos, «3,5 millones de parados dejarían de serlo», costaría casi 140.000 millones de nuevo gasto público en plena época de reducción del déficit.

La cifra anterior es el resultado de sumar los empleos que propone este partido de extrema izquierda al actual volumen de empleados públicos de la Administración. Actualmente, en las diferentes categorías del Estado hay cerca de tres millones de personas empleadas, por lo que la propuesta de Podemos supondría más que duplicar la plantilla.

Para sufragar esta propuesta, que supone básicamente «menos mercado y más Estado», Podemos apuesta por un modelo fiscal aún más confiscatorio que el actual y, por tanto, fía gran parte de su modelo a la subida de impuestos. En 2014, el gasto público total fue de 461.124 millones de euros (el 43,6% del PIB), por lo que la propuesta de Podemos lo llevaría hasta cerca de 600.000 millones (el 57% del PIB).

PSOE, más gasto público

La propuesta estrella del PSOE para reducir el alto desempleo es el denominado como «Programa Garantía+45», destinado a parados que lleven más de dos años sin empleo. Consiste en la creación de 200.000 empleos con contratos temporales –un mínimo de seis meses– retribuidos con el salario mínimo (645 euros por 14 pagas). Los contratantes serían la Administración y organizaciones sin ánimo de lucro. Si el plan lograse sus objetivos, los 200.000 nuevos empleados durante 12 meses tendrían un coste de unos 1.800 millones, aproximadamente.

Además, el PSOE también ofrece un amento de las políticas activas de empleo, hasta los 15.000 millones de euros, más de 10.000 millones por encima del presupuesto para esta partida en 2015 y el equivalente al límite presupuestario del Ministerio de Fomento. Entre 2016 y 2023 –dos legislaturas–, este partido también promete que el salario mínimo interprofesional (SMI) pasara de 645 a 930 euros (un 44% más).

El contrato único de C’S

El modelo de Ciudadanos promete un contrato único, un seguro contra el despido y bonificaciones fiscales a las empresas que contraten a parados de larga duración, así como a las que menos despidan. Además, y en línea con la reforma de los sistemas de formación que actualmente se encuentra en trámite parlamentario, el partido que lidera Albert Rivera apuesta por quitar la exclusividad en la gestión de los fondos a sindicatos y patronal para evitar nuevos escándalos como el de los ERE. La formación también apuesta por la formación, y promete destinar 1.200 euros a los desempleados que deseen aumentar su educación. Si los 5,5 millones de parados solicitasen esta ayuda, el coste de la medida sería de unos 6.600 millones de euros. Ciudadanos pretende fomentar la creación de un Fondo Europeo para el Empleo.

Las reformas del PP

El partido del Gobierno promete potenciar la formación profesional tanto de los desempleados como de los ocupados, así como el Plan de Empleo Juvenil para que los menores de 25 años se inscriban en el mismo. Los proyectos de formación dual (entre el centro educativo y la empresa) también forman parte de las primeras propuestas que ha hecho públicas el PP, que también ofrece el fomento de la contratación indefinida frente a la temporal, mediante incentivos que promuevan la creación de empleo estable.

Los populares prometen reforzar la asistencia e integración de los parados de larga duración, de los mayores y de aquellos trabajadores menos cualificados. Los servicios de empleo tendrán una mayor atención individualizada, con un modelo de orientador/ tutor procedente del sector público. El PP no ha cuantificado aún el coste de sus políticas.