A Urkullu no le bastará un pacto con el PSE

«Sorpasso» de libro de Podemos, que, con 15 escaños, deja a los socialistas en el limbo de la irrelevancia política.

La irrupción de Elkarrerin-Podemos en el mapa político vasco engendrará un nuevo equilibro de partidos en el que el PNV, aunque mantendrá su hegemonía, deberá pactar para que Iñigo Urkullu repita en Ajuria Enea. De hecho, si el próximo domingo se cumple el sondeo elaborado por NC Report para LA RAZÓN, los nacionalistas vascos no podrán gobernar, como lo han hecho durante la última legislatura, sólo con el apoyo del Partido Socialista de Euskadi. Necesitarán también los escaños del PP para llegar a la mayoría absoluta de 38 diputados. El PNV mantiene los 27 escaños que logró en las autonómicas de 2012 pero la debacle del PSE –que pierde nada menos que 7, pasando de 16 a 9– provocará que la suma de sus representantes se quede en 36, dos menos de la mayoría absoluta. Esta circunstancia obligará a Urkullu a sumar al PP al pacto de gobierno o a aventurarse a una legislatura de la mano de Podemos o EH-Bildu.

Gráfico: Datos del País Vasco

Salvo los nacionalistas vascos, todas las fuerzas políticas perderán representación parlamentaria tras las elecciones del 25-S debido a la entrada de los 15 diputados de Elkarrerin-Podemos. Por eso es significativo el origen del electorado que se inclinará por la lista encabezada por Pili Zabaleta. El estudio de NC Report señala que un 22,5% de los electores que en 2012 votaron al PSE se inclinarán en la siguiente cita con las urnas por Podemos. Un 18% de los votos de EH Bildu se pasaran también a la formación que encabeza Iglesias desde Madrid. Estas dos bolsas de votos (que representan 48.000 y 50.000 votos respectivamente) son las principales en una nueva marca política que logrará enrolar a un 29,4% de los nuevos electores.

Los socialistas reparten proporcionalmente la pérdida de siete escaños en las tres provincias, concretamente se dejan tres en Álava, dos en Guipúzcoa y dos en Vizkaya. Los 15 escaños de Podemos también se distribuyen equitativamente a razón de cinco por provincia, lo que supone que en todas las circunscripciones vascas Elkarrerin-Podemos saque dos escaños de ventaja a los socialistas: un «sorpasso» de libro.

Tambien son interesantes los datos que arroja la encuesta en cuanto a la segmentación del voto por grupos de edad. El PNV es el partido más votado entre los electores de entre 45 y 64 años (23,6%) y también entre los mayores de 65 años donde con su 32,1% saca más de veinte puntos de diferencia al segundo (el PSE). El ranking se invierte entre los electores más jóvenes. Los situados entre los 18 y 29 años de edad votan mayoritariamente EH Bildu (19,7%) y también la formación independentista gana entre los 30 y 44 años, aunque aqui el reparto es más equitativo y también el PNV y Podemos están en torno al 16%.