Corrupción en Cataluña
Efial y CGI, las consultoras que desviaban fondos municipales a sociedades privadas
La consultora Efial, ya vinculada al «caso del 3%», está en el epicentro del nuevo escándalo de corrupción. Según fuentes de la Fiscalía Anticorrupción, tanto cuando actuó bajo ese nombre como al hacerlo como CGI (Control de Gestión de Ingresos), los investigados construyeron «una estructura paralela en los ayuntamientos para evitar en su actuación la labor supervisora del secretario e interventor municipales». Durante la investigación se ha detectado la creación de la figura instrumental y ficticia de «sociedades públicas carentes de actividad específica, creando un entramado fraudulento mediante el que se desviaban fondos públicos municipales a la citada entidad pública y de ésta a la sociedad mercantil privada».
La «operación Térmyca» es fruto de una pieza separada del «caso del 3%» que se inició con la investigación al Ayuntamiento de Torredembarra en 2014. Efial se habría puesto al servicio de Daniel Massagué, ex alcalde de la localidad, quien fue imputado por cohecho, blanqueo de capitales y malversación. Una vez detenido, los registros confirmaron la existencia de informes donde constaban pagos a Efial que podrían alcanzar los 18.000 euros, llegando a facturar cerca de 90.000 al año por trabajos paralelos para la Administración.
Vinculado también con la presunta trama de corrupción en Torredembarra aparece el nombre de Antonio Martos Carrasco. Entre las irregularidades investigadas estaba la contratación de Efial, propiedad de Martos y sus socios Jaume Sabater y Xavier Termens. Efial tenía contratos similares con los municipios de L’Ametlla de Mar y Ascó. Los tres gobernados en solitario o en coalición por CiU.
Aparte del caso de Torredembarra, las sospechas judiciales en las investigaciones de 2014 se centraron en la irregularidades de dos contratos con Efial de Cala Gestió (L’Ametlla de Mar) por valor de 465.000 y 396.000 euros. La sociedad municipal la presidía el alcalde Andreu Martí (CiU). Un contrato similar fue el firmado con Ascó Serveis, por valor de 351.000 euros, cuando Martos ya era director general de la sociedad municipal. A raíz de las investigaciones de 2014 se supo que la antigua Efial había sido contratada también por los municipios de Tortosa, Riudoms, Cambrils, Les Borges del Camp, Seu d’Urgell, Masquefa y Calonge.
El otro socio fundador de Efial, Jaume Sabater Rovira, reparte su actividad entre Andorra y Barcelona. Fue alcalde de Portbou y desde 1987 ha ocupado cargos relevantes en la Administración andorrana y en sus entidades financieras. Actualmente es el presidente de la Associació d’Entitats Financeres de Andorra.
Meses después del escándalo, Efial fue absorbida por CGI (Control de Gestión de Ingresos), de manera que las sospechas de los cuerpos de seguridad hicieron pensar que las prácticas centradas en Cataluña podían haber pasado a formar parte de otros puntos del panorama internacional.
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