El Gobierno acelera los trámites para nombrar al nuevo fiscal general

Rajoy no quiere prolongar la interinidad de Navajas ante los procesos abiertos a los soberanistas en Cataluña. Espera tener un nombre para el próximo Consejo de Ministros.

El Gobierno no tiene la más mínima intención de que la interinidad al frente de la Fiscalía General del Estado, producida tras el fallecimiento repentino e inesperado de José Manuel Maza la tarde del pasado sábado en Buenos Aires, se prolongue más allá de lo estrictamente necesario. De hecho, según ha podido saber LA RAZÓN de fuentes próximas al Ejecutivo que preside Mariano Rajoy, está trabajando ya en la búsqueda del nuevo titular, e incluso no se descarta que este próximo viernes se proponga ya al candidato. Si materialmente no fuese posible dar respuesta tan pronto a una situación que no estaba en la agenda, esa propuesta se produciría el día 1 de diciembre. «Se va a intentar tener una propuesta tan pronto sea posible. A ver si se llega para este próximo viernes», afirmaron al respecto las fuentes consultadas por este diario.

Y es que el Gobierno considera que dado el trascendental momento que se vive en estos momentos en el ámbito judicial, y donde la posición de la Fiscalía es más que relevante en procesos como todo lo relacionado con la Declaración Unilateral de Independencia de Cataluña, es necesario que la Fiscalía General del Estado recupera la estabilidad lo antes posible. Hay que tener en cuenta que, por ejemplo, en esta causa el criterio de la Fiscalía puede resultar determinante, toda vez que no hay acción popular personada en el proceso, ante una petición de libertad por parte del ex vicepresidente de la Generalitat Oriol Junqueras y los ex consejeros que están en prisión. También es trascendental la postura que mantenga en caso de que la Justicia belga entregue al ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, ya que si el Ministerio Público no solicita su ingreso en la cárcel el juez no podría acordarla.

En todo caso, el teniente fiscal del Tribunal Supremo, Luis Navajas, que será quien asuma de forma interina la «jefatura» de la Fiscalía General, siempre ha mantenido un criterio común con Maza frente a este desafío al Estado y avaló la presentación de las querellas contra Forcadell, Puigdemont y el resto de investigados.

En cuanto al sustituto de Maza, en estos momentos no hay nada decidido. Lo único es que, previsiblemente, y dado los últimos nombramientos de responsables al frente de la Fiscalía, se espera que sea un magistrado o fiscal del Tribunal Supremo, o que tenga esa categoría, que es el más alto de la cúspide judicial. A ese tribunal pertenecía el recientemente fallecido y su antecesora, Consuelo Madrigal.

Una vez que el Gobierno realice su propuesta de candidato, deberá ser oído el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) –para controlar que cumple todos los requisitos legales– y previa valoración de su idoneidad por parte de la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados. En todo caso, estos criterios no preceptivos no vinculan para nada la decisión del Ejecutivo. El candidato debe ser un jurista de reconocido prestigio y contar con más de 15 años de ejercicio de su profesión, por lo que también podría recaer en un jurista que no fuese ni magistrado ni fiscal, aunque el Ejecutivo no contempla tal opción.

La gestión de estos trámites puede realizarse de manera muy rápida, hasta el punto, según fuentes jurídicas, de que si el Consejo de Ministros formalizara su candidato el próximo viernes, la semana siguiente podría el Consejo General del Poder Judicial dar su opinión e incluso se podría convocar a la Comisión de Justicia del Congreso en esa misma semana, con lo que el 1 de diciembre se podría oficializar el nuevo titular de la Fiscalía General. Si no diese tiempo de hacer la propuesta hasta el próximo día 1, sería en el inmediato Consejo de Ministros cuando se llevase a cabo la citada formalización. Maza encarnó la contundencia máxima del Estado contra el secesionismo y en el Gobierno sostienen que la acción de la Fiscalía ha sido determinante para conseguir que el «procés» fuera desactivado judicialmente. Aunque fue reprobado por el Congreso de los Diputados, Mariano Rajoy mantuvo siempre su plena confianza en él. Para el Gobierno es fundamental que su sustituto continúe con su trayectoria. Maza firmó personalmente las querellas por rebelión, sedición y malversación que se investigan en el Supremo y la Audiencia Nacional, y que han acabado con el Govern destituido en la cárcel, salvo Puigdemont y los ex consellers que se han fugado a Bélgica.