Comunidad de Madrid
El PP ve ahora a Cifuentes en la Comunidad de Madrid y a Aguirre en el Ayuntamiento
Rajoy remite a Génova el futuro de Ignacio González
Mientras el PP sigue a la espera de la decisión final de Mariano Rajoy sobre las candidaturas pendientes de designación, entre ellas las de Madrid –Comunidad y Ayuntamiento–, el escenario lo van ajustando a los nuevos movimientos que se producen en el tablero. Las quinielas sobre nombres y sobre plazos han ido rehaciéndose en función de las circunstancias y de las novedades externas que están rodeando al proceso. Pero, a día de hoy, la opinión mayoritaria dentro de la dirección popular se inclina por apostar por que la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, puede encabezar la candidatura en la Comunidad de Madrid, y Esperanza Aguirre, la del Ayuntamiento. Todas estas conjeturas no valen nada hasta que no hable el presidente del Gobierno y tome la decisión final, advierten, no obstante, en la sede nacional del PP.
El contexto se ha ido complicando tanto que dentro de las filas populares cada vez ven menos margen de actuación para Rajoy. Sin banquillo, con el calendario ya tan encima que no tiene tiempo para improvisar un candidato que necesite darse a conocer, y con el inconveniente de tener que gestionar al PP de Madrid, dominado por Aguirre, sin crearse un problema añadido al del difícil escenario electoral.
Hay quienes dentro del PP sostienen que la situación ha llegado a un punto en el que la única tabla de salvación sería «el órdago a lo grande», es decir, ir a por candidaturas tan de peso como las que podrían representar la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, o la ministra de Fomento, Ana Pastor. Pero de puertas adentro nadie se la juega a que ésta será la opción elegida por el jefe del Ejecutivo. Por el contrario, el escenario que ven más probable es el que introduce a Cifuentes en el «ticket» madrileño y conserva, «pese a todo», a Aguirre para el Ayuntamiento.
Argumentan en el PP que este último encaje permitiría a Rajoy mantener un equilibrio interno que le garantizase la paz en la organización regional, aunque al tiempo dejase la puerta abierta a que le reprochen que no tenga la valentía de dar el puñetazo necesario para recuperar el control del aparato regional. También le permitiría evitar el riesgo de que un mal resultado electoral en el Ayuntamiento, con otro candidato distinto a Aguirre, fortaleciese a ésta última en su enfrentamiento con él. La presidenta del PP regional sigue sin ser una persona de su confianza, y en Génova siguen sin fiarse de ella. Todos estos análisis encajan en un contexto en el que el PP se ha convertido en un hervidero de conjeturas, rumores y especulaciones a la espera de que se despejen las incógnitas. El ruido, no obstante, se silenciará de inmediato en cuanto hable el Comité Electoral Nacional. Y en el PP prevén que podría hacerlo este jueves o viernes.
Entretanto, el presidente del Gobierno se remitió ayer a Génova al ser preguntado por su apoyo al presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y por su futuro político. En una comparecencia en el Palacio de la Moncloa, junto al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, Rajoy fue fiel a sí mismo y no dijo ni una palabra sobre las candidaturas. Pero tampoco dejó ver ningún gesto que se pudiera interpretar como un apoyo hacia Ignacio González justo cuando éste hace frente a una «tormenta» en vísperas de que el PP acabe de cerrar las listas para las elecciones autonómicas y municipales.
Rajoy se sumó así a una estrategia de la dirección nacional que traslada el mensaje de que deja a su suerte al presidente madrileño ante las últimas informaciones publicadas y después de que éste se defendiese con la gruesa acusación de que varios mandos policiales han intentado chantajearle en el marco de la investigación sobre su ático en Marbella. El jefe del Ejecutivo se limitó a indicar que la Policía ya ha dicho que en los próximos días dará una explicación sobre estas denuncias. «Y yo me sumo a lo que diga el Ministerio del Interior en su momento», puntualizó. El ministro del Interior, Jorge Fernández, y el director general de la Policía, Ignacio Cosidó, eludieron también pronunciarse sobre estas acusaciones contra dos comisarios de la Policía.
En cuanto a la pregunta directa sobre si Ignacio González ha quedado inhabilitado para encabezar la candidatura a la Comunidad de Madrid, Rajoy invitó a dirigir esa cuestión a Génova porque «es allí donde se toman las decisiones». Por su parte, Ignacio González ha optado por ignorar la estrategia de la dirección de su partido de ponerse de perfil y ayer volvió a reafirmarse en su disposición a encabezar la candidatura para la Comunidad de Madrid.
✕
Accede a tu cuenta para comentar