Política

El PSOE también rescata la exhumación de Franco

Promete en su programa reconvertir el Valle de los Caídos e impulsar la Ley de Memoria Histórica aprobada en 2007

Pedro Sánchez llevará en su programa una propuesta en materia de Memoria Histórica mucho más ambiciosa que las de Zapatero y Rubalcaba
Pedro Sánchez llevará en su programa una propuesta en materia de Memoria Histórica mucho más ambiciosa que las de Zapatero y Rubalcabalarazon

El próximo 20 de noviembre se cumplen 40 años de la muerte de Francisco Franco y sólo un mes después, el Partido Socialista concurrirá a las elecciones generales con un programa en el que aboga por revisar profundamente la Memoria Histórica recuperando la ley que aprobó José Luis Rodríguez Zapatero en 2007. Se trata, además, de la primera vez que los socialistas recogen explícitamente en su oferta electoral su compromiso en esta materia, ya que ni Alfredo Pérez Rubalcaba en 2011 y ni siquiera Zapatero en 2004 –cuando bajo su mandato se aprobó la ley– hicieron una alusión mayor que la de la creación del Centro de la Memoria Histórica de Salamanca o su desarrollo en profundidad.

Ahora, Pedro Sánchez se compromete a «dar un nuevo impulso» a la Ley para que el Estado asuma «directamente la gestión de las políticas y actuaciones de búsqueda de la verdad, justicia y reparación de las víctimas». Un compromiso que se incardina en las tres enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado que el PSOE presentó en agosto. Entonces, como ahora, los socialistas se comprometen a «aplicar con urgencia el nuevo carácter dado al Valle de los Caídos» por la Ley de Memoria Histórica y, en consecuencia, exhumar los restos allí despositados de Francisco Franco y del fundador de la Falange, José Antonio Primo de Rivera.

Las tareas de redefinición y reorientación del mausoleo, así como la exhumación y el traslado de los restos del altar mayor de la basílica al «espacio y panteón privado que indiquen las familias», está cifrado por el partido en unos 150.000 euros, según la citada enmienda. La retirada de los restos de estas dos figuras del franquismo es un requisito imprescindible para que este espacio deje de ser un monumento «contrario a la cultura de la convivencia, la paz, la concordia cívica y la reconciliación». Ya sea en forma de enmienda o de proposición no de ley, el PSOE ha solicitado en numerosas ocasiones que se cumpla el artículo 16.2 de la Ley de Memoria Histórica que reza que «en ningún lugar del recinto podrán llevarse a cabo actos de naturaleza política ni exaltadores de la Guerra Civil, de sus protagonistas o del franquismo».

Las de Franco y Primo de Rivera no son las únicas exhumaciones que preocupan a los socialistas, ya que también pretenden rescatar la dotación de partidas presupuestarias relacionadas con esta práctica para la recuperación de los restos de las víctimas de la Guerra civil y del franquismo que todavía permanecen en fosas y cunetas. Un programa que costaría alrededor de tres millones de euros y para el que aseguran la coordinación con ayuntamientos y asociaciones de exhumación e identificación, así como la actualización permanente de los mapas de fosas.

También prevén aumentar el apoyo financiero e institucional a los familiares y asociaciones de víctimas, para «caminar así hacia una mayor dignificación», y proceder a la reapertura y potenciación de la Oficina de Ayuda a Víctimas de la Guerra Civil, que creó el Gobierno de Zapatero. A esto se añade la creación de bancos de ADN «con la urgencia y celeridad a que obliga la avanzada edad de muchos familiares» de las personas desaparecidas durante la dictadura.

Sánchez tampoco pasa por alto el aseguramiento de la Ley de Memoria Histórica en materia de símbolos franquistas y promoverá su retirada en instituciones y lugares públicos sin que en ello interfiera la «aplicación arbitraria» que están llevando a cabo algunos municipios. Además, se fomentará la introducción de contenidos en el sistema educativo derivados de los trabajos realizados.