Marcos de Quinto pagaba menos impuestos en Portugal

La carga fiscal para los extranjeros residentes es muy inferior a la de los que viven en España.

El ex vicepresidente de Coca–Cola y nuevo fichaje de Ciudadanos, Marcos de Quinto, traslada su residencia de Lisboa a Madrid, lo que implicará que pague más impuestos. El ejecutivo madrileño tenía su residencia hasta ahora en la capital portuguesa, según ha sabido este periódico.

De Quinto ha comunicado a través de una portavoz de Ciudadanos que abonará los impuestos correspondientes a su actividad económica durante este año en España, mientras que los de 2018 los pagará en Estados Unidos y Portugal. «Siempre pago mis impuestos allí donde resido», señaló en Twitter en respuesta a Miguel Ángel Rodríguez, ex secretario de Estado de Comunicación con José María Aznar, que le preguntaba por un «rumor» acerca de que el número dos de Albert Rivera había estado domiciliado en el país vecino «para no pagar impuestos en España». De Quinto explicaba que pagó impuestos en Estados Unidos entre 2015 y 2017 y exigía a Rodríguez que «no difunda rumores» y que le pregunte a él mismo «en vez de asumir que actúo como algunos antiguos compañeros suyos», en referencia a miembros del PP.

La carga fiscal para los extranjeros residentes en Portugal es muy inferior a la de los que viven en España. Desde el año 2009, un régimen fiscal especial permite que los residentes no habituales paguen un tipo único del 20 por ciento sobre todos sus ingresos obtenidos en suelo luso, con independencia del montante alcanzado. La condición es que vivan allí al menos 183 días al año. No pagan impuestos de patrimonio, de sucesiones ni por donaciones. A raíz de la crisis económica, el país luso permite a los extranjeros que compren una casa estar exentos de pagar impuestos por los ingresos que llegan del exterior.

El número dos en la lista al Congreso por Madrid ha residido en los últimos tiempos en Lisboa con su esposa, la soprano brasileña Angélica de la Riva.

Marcos de Quinto ganó 7,63 millones de dólares (más de siete millones de euros) en 2016, siendo vicepresidente mundial de Coca-Cola, convirtiéndose en el tercer ejecutivo mejor pagado de la multinacional estadounidense.

A los mandos de Coca-Cola España estuvo finalmente 35 años, hasta el 1 de mayo de 2017, cuando dejó los cargos de vicepresidente ejecutivo y responsable mundial de marketing. Pero no se ha desvinculó del todo hasta el pasado agosto, ya que durante algo más de un año siguió ligado a la firma estadounidense como asesor, cargo por el que en 2017 ganó 5,36 millones de euros, según «Expansión».

El salto a la política de De Quinto se formalizó el pasado sábado, cuando se presentó su candidatura durante un acto de Ciudadanos en Toledo.