Puigdemont no pide perdón

Las víctimas del terrorismo consideran una humillación que el presidente de la Generalitat las «utilice» y compare la derrota de ETA con el «procés»

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el Govern en pleno no están dispuestos a rectificar. Pese a que sus palabras, comparando la «persistencia» con la que se combatió a ETA y la «persistencia» que debe guiar al independentismo hacia sus objetivos, fueron percibidas de forma generalizada como un evidente desliz, ni el president ni el Gobierno catalán, que realizó ayer su reunión semanal, tienen intención de justificarse. Si ya el líder del Govern, que tuvo la oportunidad de matizarlas en el acto que conmemoraba el 30 aniversario de las víctimas del atentado de Hipercor en Barcelona, no lo hizo, ayer la portavoz del Govern, Neus Munté, mantuvo la misma línea. No corrigió a Puigdemont y se sacudió la controversia atribuyendo la culpabilidad a los demás.

Según Munté, se ha hecho una «interpretación injusta» y todo forma parte de una «polémica interesada». Sin pedir disculpas, aseguró que en las palabras de Puigdemont «no hubo voluntad de herir la sensibilidad de nadie», y trató de dar una explicación y suavizarlas, al considerar la «persistencia» como un «valor que ha permitido lograr retos como el fin del terrorismo en España», pero ya sin aludir a la desafortunada equiparación del presidente catalán.

Pero las palabras de Puigdemont indignaron a las víctimas, las mismas que nunca han contado con el perdón de los que les asesinaban y que tampoco recibieron esta vez las disculpas de nadie de la Generalitat por humillarlas.

El presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero destacó que «el máximo representante del Gobierno catalán ha perdido el poco respeto que las víctimas del terrorismo teníamos a su persona» un respeto que tenían «simplemente por el cargo que representaba». «Decir memeces a veces tiene consecuencias: ser non grato dentro del colectivo de víctimas. Comparar su absurdo y anticonstitucional proyecto independentista con la persistencia en la lucha contra ETA es una soberana ofensa a las víctimas del terrorismo y una falta de respeto a sus familiares», consideró. Porque, «no se puede comparar el asesinato y mutilación con las ideas deformadas del independentismo catalán». Portero insistió en que «comparar muertos con independencia es lo más denigrante que una víctima del terrorismo catalán podría escuchar». y es que el hecho de que Puigdemont haya lanzado este mensaje el día del 30 aniversario del atentado de Hipercor muestra su falta de delicadeza. «Esta ofensa no merece ni rectificación, porque sabríamos que no habría arrepentimiento alguno. Merece una dimisión inmediata. Nunca se hará realidad esta renuncia. Como tampoco habrá independencia en Cataluña».

Por su parte, el presidente de la AVT, Alfonso Sánchez, tildó las palabras del presidente de la Generalitat de «ignominia». «¿Cómo puede permitirse el utilizar políticamente a las víctimas para su causa?». Sánchez subrayó que lo que hizo Puigdemont es de «una bajeza moral increíble» y de «tener una cara dura impresionante» sobre todo de alguien que «nunca a acudido a actos del terrorismo».

El presidente de la Asociación de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado Víctimas del Terrorismo, Francisco Zaragoza, subrayó que «este individuo sólo quiere su “procés”». Además, recordó que nunca ha estado con las víctimas catalanas ni las ha recibido; negándolas incluso subvenciones.

Por su parte, el presidente de Acvot, José Vargas, dijo que las palabras de Puigdemont son «otra canallada más , sin razón, infamia y desfachatez» . «Si hubiera sabido el lunes las palabras exactas hubiera cambiado sobre la marcha mi discurso».