Rajoy da por terminado el «procès»

Defiende que el 155 se aplica con «toda normalidad» y que «las cosas van mejor» desde entonces.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, dio ayer por «acabado» el proceso independentista tras la aplicación «con toda normalidad» del artículo 155 de la Constitución. Esta suerte de acta de defunción pública del «procès» fue pronunciada en un acto de precampaña en Mataró en que el presidente estuvo acompañado por el líder del PP catalán Xavier García Albiol el candidato a la alcaldía de esta localidad barcelonesa, José Manuel López. También asistieron la ministra Dolors Montserrat y el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo.

Rajoy defendió la candidatura de Albiol a la presidencia de la Generalitat argumentando que el 22 de diciembre el Partido Popular no dará sorpresas a sus votantes en su política de pactos, algo que no puede afirmarse tajantemente del resto de partidos del bloque constitucionalista. «Todo el mundo sabe lo que va a hacer el PP después de las elecciones. No sé lo que van a hacer los demás ni si se van a aliar con alguien», afirmó. En una clara referencia a los socialistas catalanes, el presidente del Gobierno explicó que no existe posibilidad alguna de que los populares «se entiendan con los independentistas ni con la extrema izquierda que acude al Tribunal Constitucional para que no se aplique el 155 en Cataluña».

El presidente realizó asimismo un encendido elogio de la Constitución de 1978 porque, entre otras cosas, «ha procurado mayor nivel de autogobierno» para Cataluña y para el resto de Comunidades Autónomas, circunstancia que hace que no sea el mejor momento para cambiar los principios en los que se basa. Ahora lo necesario es, según el líder del Ejecutivo, «recuperar la normalidad, generar tranquilidad, procurar la convivencia y acabar con las tensiones» para que vuelvan las empresas y se recupere la maltrecha economía.

Durante el acto hubo también alusiones a la propuesta lanzada por el líder de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, de dotar a Cataluña de una hacienda propia. Al respecto, Rajoy dijo que «no es momento de ocurrencias ni intentar contentar a quien no quiere ser contentado». Y aportó otro argumento: «Los derechos de las personas son mucho más importantes que los derechos de los territorios y sus hectáreas».

Rajoy cargó también contra el ex president Puigdemont, al que recomendó: «En la vida conviene elegir bien a los enemigos, porque, si no, acabas teniendo problemas», dijo en referencia a las críticas lanzadas contra la Unión Europea. Si esta ha apoyado al Gobierno durante la crisis es precisamente porque han defendido los valores sobre los que esta fue fundada.