Madrid

Sánchez ve un pacto entre López y Díaz para evitar primarias

Entienden que podría plegarse ante la presidenta andaluza y sumarse a una candidatura de unidad liderada por ella. Ven necesario el «choque de trenes Pedro-Susana» para que haya una catarsis en el PSOE

Patxi López, ayer durante su rueda de prensa en Madrid
Patxi López, ayer durante su rueda de prensa en Madridlarazon

Entienden que podría plegarse ante la presidenta andaluza y sumarse a una candidatura de unidad liderada por ella. Ven necesario el «choque de trenes Pedro-Susana» para que haya una catarsis en el PSOE

Mitin de Xirivella (Valencia). Pedro Sánchez charla de manera informal con un grupo de periodistas que cubren el evento y sugiere que Patxi López y él forman un tándem indisoluble de cara a una futura candidatura a las primarias del partido. Donde esté uno, estará el otro. El comentario no sentó bien al ex lendakari vasco, que desde entonces ha tratado de desvincularse de la hoja de ruta del ex secretario general y marcar un perfil propio que le llevó ayer a presentar formalmente su candidatura a las primarias. Una decisión «hábil» que ha tomado «a espaldas» del que fuera líder del PSOE y que «busca cerrarle el paso», según fuentes cercanas a Sánchez. Su candidatura y la de López son excluyentes entre sí, ya que en caso de que ambos se presentasen dividirían el caladero de voto «antisusanista» en el que se basan sus únicas posibilidades de éxito frente a la fortaleza de la presidenta de Andalucía. «El que pega primero pega dos veces», señala una diputada afín a Sánchez que considera que «ahora Pedro ya no se puede presentar» y critica que López le persuadiera en su día para dejar el escaño y no oponerse a la investidura de Mariano Rajoy si quería recuperar el liderazgo del PSOE.

Los recelos del entorno del ex líder vasco han encontrado su reflejo en los pedristas. Fuentes del entorno del secretario general reniegan de la idea de apoyar a Patxi López y enfrían la posibilidad de que Sánchez vaya a entregar al ex lendakari su apoyo en bandeja, a pesar de que éste señalara ayer que le «gustaría sumar a Pedro y a miles de militantes a su proyecto». Desde este sector no se ve al vasco con un perfil lo suficientemente beligerante como para enfrentarse a Susana Díaz en unas primarias «a cara de perro» y entienden que López podría plegarse ante la presidenta andaluza y pactar, a cambio de ciertas contrapartidas, una candidatura de unidad liderada por ella que pusiera fin al debate por el liderazgo. Por su parte, el ex lendakari niega esta tesis y asegura que llevará su proyecto «hasta el final», porque es «imprescindible que la militancia elija a su líder», de lo contrario se «cerraría en falso el debate». El convencimiento del pedrismo es que sólo con Sánchez se asegura que habrá batalla en las primarias, un requisito que consideran capital para fijar el nuevo rumbo del PSOE. «Necesitamos una catarsis. Debe producirse el choque de trenes entre Pedro y Susana», comentan a LA RAZÓN desde el círculo del ex secretario general. Sin embargo, aunque existe esta creencia, el ex líder socialista todavía no ha tomado la decisión, que «no debería demorarse más allá de enero, aunque se anuncie posteriormente», aseguran las citadas fuentes, y que ahora no tiene visos de prosperar tras el paso adelante del vasco.

El hecho de que Sánchez todavía no esté decidido a presentarse se fundamenta en cuestiones de cariz personal, pues aunque considera que «no tiene nada que perder» en lo orgánico es consciente del fuerte desgaste que llevaría aparejada una nueva batalla interna por el liderazgo. Fuentes de su entorno están convencidas de que, en caso de dar el paso, sumaría más votos que López, aunque reconocen que «ya no tiene sentido». «Sería dividir los apoyos», destacan. También se muestran escépticos sobre la implantación que tendrá la candidatura del ex líder vasco en los sectores afines al ex secretario general, pues se entiende que López no es heredero del discurso del «no es no». El sector afín a Sánchez quiere seguir explotando la negativa a la investidura de Mariano Rajoy y recuerdan que el ex lendakari se abstuvo en la votación. En su comparecencia ayer en Madrid, Patxi López reconoció que la abstención del PSOE fue «un error», pero aunque «no compartió la decisión» la acató y la «respetó».

El día después de la «catarsis» es lo que genera más incertidumbre entre los pedristas consultados, que reconocen las dificultades que tendría un Sánchez victorioso en las primarias para enfrentarse –de nuevo– al poder territorial crítico. No es descabellado pensar que con el ex secretario general volverían los problemas internos que le hicieron caer en octubre. En este punto todos miran a los congresos regionales que se celebrarán tras el 39º Congreso, pero el liderazgo de los presidentes autonómicos –que representan la contestación interna a Sánchez– no estará en cuestión mientras mantengan sus responsabilidades de gobierno. Esto si gana Sánchez, porque si la que resulta vencedora es Díaz, los afines al ex líder socialista advierten de «un riesgo cierto de escisión» y señalan que, en ese caso, abandonarán el partido por no compartir el rumbo que pretende imprimir la presidenta andaluza. Pero de momento el único que ha dado el paso ha sido Patxi López.