Estas son las pruebas que tendrás que hacerte en el primer trimestre del embarazo

Todas las pruebas en el embarazo están destinadas a la prevención de posibles problemas que comprometan la salud de la madre o el bebé. Sigue siempre las instrucciones de tu ginecólogo y matrona.

El embarazo no supone una enfermedad ni un compromiso para la salud de la mujer. Sin embargo debes conocer que existen determinadas pruebas encaminadas a detectar anomalías o complicaciones que pueden aparecer durante la gestación y requieren una atención especial porque pueden tener repercusiones sobre tu salud y la del bebé. Además, durante los tres trimestres en los que vamos a dividir el embarazo ocurren cambios en la madre que son importante que conozcas. Aprende a entender cómo tener un “embarazo saludable”.

PRIMER TRIMESTRE

Primera ecografía.

Se realiza normalmente entre la 7ª-8ª semana. Tiene las siguientes utilidades:

• Confirmar el diagnóstico de embarazo obtenido por el test en orina.

• Localización intrauterina del embarazo: en algunas ocasiones se producen embarazos ectópicos (fuera de la cavidad uterina) y esto entraña un riesgo para la madre. Mediante la primera ecografía veremos la adecuada localización del embarazo (dentro del útero).

• Datar la gestación: mediante la medida del embrión estableceremos de forma precisa las semanas de embarazo, así como la fecha probable de parto. Estos es importante para aquellas mujeres con ciclos irregulares, con alteraciones de la ovulación (ej Síndrome de ovario poliquístico) o en aquellas mujeres que se quedan embarazadas por ejemplo en circunstancias en las que los ciclos sean irregulares, como por ejemplo durante la lactancia.

• Determinar si se trata de un embarazo único o gemelar; además de ver si existen dos bolsas con dos placentas separadas en caso de las gestaciones gemelares o si por el contrario están ambos embriones en la misma bolsa y comparten placenta.

• Determinar la presencia de hematomas u otras anormalidades que puedan ocasionar síntomas como sangrado en esta etapa de la gestación.

Analítica del primer trimestre. Se debe realizar en torno a la semana 8-10. Es importante porque determina el estado general de salud de la mujer al principio del embarazo, y excluye estados carenciales como por ejemplo la anemia por falta de hierro (anemia ferropénica). Determina parámetros importantes como:

• Grupo sanguíneo y Rh: de cara a prevenir incompatibilidad Rh con el bebé (veremos más adelante como evitarla).

• Serologías: ver inmunidad frente a virus (hepatitis B, Citomegalovirus) y descartar infecciones por otros virus (VIH y Hepatitis C). Además se determina si has pasado la Toxoplasmosis (parásito que se transmite habitualmente por ingesta de carnes de cerdo, a través de los gatos o por heces de estos que contaminen tierra de jardinería, etc). De forma rutinaria se descarta infección también por Treponema pallidum que es el agente causante de la sífilis.

• En algunas mujeres seleccionadas (mayores de 35 años, con antecedentes de diabetes gestacional en embarazos previos, etc) se realiza la prueba de sobrecarga de glucosa en esta primera analítica para excluir diabetes gestacional. En caso de que no esté alterada, hay que repetirla en el segundo trimestre.

Ecografía de la semana 12.- Es una prueba fundamental en el control de la gestación. Se debe realizar entre las semanas 11 y 13 y en ella se mide, entre otros parámetros, el pliegue nucal del feto. Es un espacio que tiene el feto en la nuca en esta etapa del embarazo. Esta medida, junto con la edad de la madre, la longitud completa del embrión y los niveles en la sangre materna de dos proteínas que se producen en el embarazo (bhcG y PAPP-A) nos ofrece un índice de riesgo combinado. Es decir, la probabilidad de que el feto pueda presentar una alteración cromosómica tipo síndrome de Down.

Es muy importante que sepas que todas estas pruebas están cubiertas por la Seguridad Social.

Información realizada en colaboración con el doctor Jackie Calleja de la Clínica Bmum de Madrid.