Guerra

Ucrania ve signos de debilidad y fracaso en el discurso del presidente ruso

La mayoría de los ucranianos que permanecen en las zonas ocupadas del sureste desconocen la convocatoria del referéndum de anexión que se debería celebrar este fin de semana

Desde Ucrania el llamamiento a la movilización que ha hecho el presidente Vladimir Putin se interpreta como un intento del Kremlin por azuzar el miedo entre las tropas ucranianas y entre sus socios occidentales. “Rusia se ha estado movilizando durante meses”, respondió el presidente Volodimir Zelenski durante una entrevista con el periódico alemán “Bild”. Zelenski minimizó la amenaza vertida por el jefe del Kremlin sobre el despliegue de armas nucleares, pero no pudo descartar por completo este escenario porque “nadie sabe lo que está pasando dentro de su cabeza”.

El portavoz del Gobierno ucraniano, Sergiy Nikiforov, sugirió que el llamamiento a la movilización supone un reconocimiento del fracaso del Ejército ruso sobre el terreno. Afirmó que Rusia depende cada vez más de la “violencia y la represión” dentro del país. Y advirtió que la medida era “antes que nada, una tragedia para el pueblo ruso” que ahora será enviado a luchar donde los “mercenarios” y “bandidos” rusos han fallado

Según el asesor del jefe de la oficina presidencial en Ucrania, Oleksiy Arestovich, la movilización de 300.000 reclutas apunta que las pérdidas de Rusia en Ucrania podrían haber sido “más que enormes”, probablemente más de 100.000 y más cerca de 150.000 muertos y heridos.

Arestovich sostiene que el fracaso de las tropas rusas se debe a que está configurada por soldados sin experiencia militar; mal equipados y mal entrenados. Advierte de que se podrían convertir en una amenaza para el “régimen de Putin” porque a medida en que la población rusa comience a sentir de cerca los efectos de la guerra crecerá el malestar social contra sus gobernantes. También descartó los temores de que Rusia emplee armas nucleares en Ucrania: “¿Por qué llamarían a una movilización, si de hecho se estaban preparando para usar las armas nucleares?”

Los analistas militares ucranianos sugieren que es poco probable que los nuevos reclutas cambien la tendencia en el campo de batalla, ya que les llevaría meses equiparse y entrenarse mientras el Ejército ruso comienza a sentir el déficit de equipo militar moderno. Mykola Bielieskov, de la ONG “Come Back Alive” en Ucrania, dice que en mejor caso para los rusos, los 300.000 nuevos soldados podrían ser suficientes solo para repeler la ofensiva ucraniana pero no permitirían a los rusos volver a atacar.

La inteligencia militar ucraniana sugirió anteriormente que Rusia se estaba preparando para la defensa a lo largo de gran parte de la línea del frente con Ucrania quien mantiene la iniciativa. Hasta ahora, solo han continuado ataques esporádicos en la provincia de Donetsk, mientras que las tropas rusas luchan por contener la continua ofensiva ucraniana en otros lugares.

Referéndums de anexión

Las autoridades ucranianas de los territorios ocupados del sur y este del país han instado a los locales a evitar participar en los referéndums que se espera se celebren entre el 23 y el 27 de septiembre en cuatro regiones ucranianas parcialmente ocupadas.

El alcalde de la ciudad de Melitopol, Ivan Fedorov, advirtió que la ciudad corría el riesgo de convertirse en una zona gris y dijo que era peligroso para los lugareños permanecer allí. Afirmó que es probable que los hombres locales se conviertan en “carne de cañón”, ya que algunos funcionarios en Rusia ya han sugerido que la movilización debería comenzar con los residentes de los territorios ocupados de Ucrania y los ucranianos que previamente fueron deportados por la fuerza por Rusia.

El Ayuntamiento de Mariupol también advirtió que los datos individuales de quienes decidan participar en los referéndums podrían ser utilizados para movilizarlos posteriormente.

Varios residentes de Jersón a los que LA RAZÓN ha logrado contactar a través de Internet sostienen que la mayoría de la gente desconoce la convocatoria del referéndum y que no se han llevado a cabo preparativos reales. Se supone que las comisiones electorales se instalarán apresuradamente, pero es físicamente imposible garantizar que el referéndum “falso” pueda reflejar incluso las opiniones de ese 30-40% de la población que hasta ahora no ha huido de la ocupación rusa.

Mientras tanto, Rusia atacó el miércoles las regiones de Járkiv, Dnipro y Zaporiyia. Diez personas fueron rescatadas de debajo de los escombros de un edificio residencial en Jarkiv, que fue alcanzado por los misiles lanzacohetes múltiples rusos durante la noche. Tres personas resultaron heridas tras los ataques contra objetos de infraestructura y viviendas particulares en Zaporiyia.