La Policía francesa retiene a Pujol Jr. con 10.000 euros

La Policía francesa retuvo ayer, en una carretera cerca de la frontera con España, al hijo primogénito del ex presidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol Ferrusola, según han informado a LA RAZÓN fuentes conocedoras del asunto.

Pujol viajaba en un automóvil de la marca Lamborghini, matrícula de Barcelona, 7827-WG.

Los agentes se interesaron por un paquete que llevaba en el interior del coche, en el que había 10.000 euros, según los mismos medios.

Al no existir ninguna circunstancia que impidiera su presencia en Francia, con ese dinero y ese coche, se le dejó marchar sin problemas.

Los hechos ocurrieron en territorio galo a la altura de la localidad española de Puigcerdá.

Los agentes se limitaron a identificarle y las fuentes consultadas no precisaron si iba solo o acompañado en el coche deportivo.

Precios de ganga

La afición de Jordi Pujol Ferrusola por los automóviles de alta gama, (en los que, según algunas denuncias, ha transportado grandes cantidades de dinero), que ha logrado adquirir a precios de ganga, es conocida. De hecho, fue subrayada en un informe elaborado a mediados del año pasado por la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Comisaría General de Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía.

Entre los coches figuraba un Lamborghini modelo Diablo 132 SE que fue adquirido por Pujol por la irrisoria cantidad de 25.000 euros, pese que a los dueños del concesionario les había costado 126.000. Dijeron que lo habían vendido por «un precio tan bajo porque no conseguían colocarlo y no les quedó más remedio».

La lista de deportivos comprados a precio de ganga, incluye un Jaguar FFY, que fue adquirido por 3.000 euros al contado. La UDEF destacó que este vehículo vale en el mercado de segunda mano unos 80.000 euros, aunque hay unidades que llegaban a los 240.000 euros en 2006.

En 2001, Pujol Ferrusola compró un Porsche 911 por 2.800 euros. La persona que se lo vendió aseguró que la rebaja se debió a que el automóvil era usado y el motor no se hallaba en las mejores condiciones de uso.

La madre de Jordi, Marta Ferrusola, tras una comparecencia en el Parlamento de Cataluña, señaló que esta circunstancia se debía a que adquiría los automóviles en un muy mal estado y después se gastaba el dinero en repararlos.

«Necesitaba dinero»

La flota del primogénito iba creciendo y esta vez fue un Mercedes Benz SRL McLaren, por el que pagó 90.000 euros, pese a que al concesionario que lo tenía a la venta le había costado 575.000.

La policía le preguntó por tan insólito hecho y se limitó a contestar: «Es que necesitaba el dinero».

Jordi Pujol se hizo también, para ampliar su flota, con un Ferrari Testarossa por 22.500 euros. En otra ocasión, consiguió un Porsche 911 y un Ferrari 328 por un importe total de 35.000 euros.