El día en que la Reina supo que el Rey había muerto

Por primera vez en España, una obra de teatro, «Sofía», lleva a los escenarios la vida de la Reina emérita.

«Cuando han venido a anunciarte la muerte del Viejo Rey, tú, Sofía, estabas sola, en tu cuarto, leyendo un libro sobre la transmigración de las almas». Así comienza «Sofía», el monólogo que llevará por primera vez a los escenarios la vida de la Reina emérita y que arranca en un momento que cambiará su vida: el fallecimiento de un Rey cuya identidad no se desvela hasta el final de la obra y del que el autor se reserva cualquier pista. «Podría ser su padre, Pedro I, su marido, Don Juan Carlos... Todas las opciones están abiertas hasta el final», apunta Ignacio García May, autor y director del texto.

Esta obra de teatro promete, en palabras de García May, mostrarnos a la mujer que hay detrás de la Reina, «a la persona que durante años se ha escondido tras su intachable e incuestionable papel como hija, esposa y madre de reyes».

No se trata ni de una obra biográfica ni de una sátira. «Nada de esto», apunta García May a LA RAZÓN. «No es más que un intento por mostrar a la mujer que ha permanecido durante casi treinta años como consorte al frente de la corona española y que, para gran parte de la sociedad, continúa resultando un verdadero misterio», explica.

En la trama aparecerán reflejados aspectos clave de su vida ordenados desde un punto de vista diferente. El monólogo, en el que la misma actriz interpretará varios papeles, abarcará desde la infancia de Doña Sofía y su educación –uno de los puntos favoritos del autor– hasta la relación con su madre, la Reina Federica, y los años de matrimonio con Don Juan Carlos. No olvida, tampoco, las crisis familiares del presente en las que el papel de la Reina emérita ha sido tan comentado por la opinión pública. La historia comienza con un funeral de Estado que detona en Sofía «un viaje a través de los recuerdos». A partir de este punto, la historia va hacia delante y hacia atrás, «pero no por orden cronológico, sino emocional», señala García May. «No es un documental donde aparecen todos los detalles de cada cosa, ni un juicio político al personaje», insiste enfáticamente el autor, «sino un viaje por las emociones de una mujer que se caracteriza por no mostrarlas nunca en público».

Una sucesión de acontecimientos y reflexiones que ayudarán al espectador a perfilar la personalidad de Doña Sofía, oculta siempre en público tras los protocolos y contenciones que han marcado su papel como Princesa de Grecia, primero, y como Reina de España, después. Precisamente, en esta línea, destaca el modo en que se está llevando a cabo el proceso de documentación sobre la vida de la soberana.«No ha habido en ningún caso reuniones secretas ni pretendemos descubrir rasgos inéditos de la vida de la Reina», añade García May. «Todo está en los libros que los expertos en este campo han elaborado sobre los diferentes capítulos de la intensa vida de Doña Sofía». Lo que veremos sobre el escenario a partir del 31 de mayo «no va a ser el resultado de una investigación sobre lo que no se sabe de la Reina, sino de contar su vida a través de todos los acontecimientos que se conocen y que ya han sido relatados en las biografías sobre ella». Obras tan completas como las biografías firmadas por Carmen Enríquez y Pilar Urbano, o el consejo de grandes conocedores de la vida de la madre de Felipe VI, conforman la base histórica de la que se convertirá en la primera obra de teatro que llevará a la Reina Sofía a los escenarios del Español.

«El objetivo es ser objetivos», remarca el autor que, aún a día de hoy, continúa trabajando en el texto final. «Nada de opinión ni de cotilleo, ni posicionamientos a favor ni en contra».

En cuanto a la estructura formal de la obra, no se trata tampoco de un monólogo al uso. Los espectadores que acudan a disfrutar de esta pieza no se encontrarán con una mujer en el papel de la Reina Sofía durante todo el tiempo. Nada de eso.

No hay previsto, según confirma Ignacio García May, ni grandes decorados ni escenarios. El peso de la obra recaerá sobre la versatilidad de la actriz elegida: una persona que encarnará según la escena no sólo a Doña Sofía, sino también a otras figuras claves de su vida, como su madre, su hermana Irene o sus hijas, las infantas Elena y Cristina. Un papel, en definitiva, tan complejo como lo son las distintas personalidades de todos los personajes que deberá interpretar. Aunque ya han precisado el perfil de actriz que busca el promotor de la obra, lo cierto es que aún no hay confirmación oficial. El resultado final del texto, que verá la luz aproximadamente en Navidad, marcará el comienzo de esta nueva fase, cuando descubriremos quién dará vida a Doña Sofía sobre el escenario.

Dos actrices ya han interpretado a la Reina en la televisión: Marisa Paredes, en «Felipe y Letizia», y Cristina Brondo, en «El Rey». No se descarta que alguna de ellas repita en el papel de esposa de Jefe del Estado.

De hecho, éstas han sido las dos únicas ocasiones en las que la vida de la Reina emérita se ha llevado a la ficción y en ninguna era ella la protagonista de la trama. «Hay que romper la barrera con nuestra propia historia», apunta García May, afirmación que respalda Juan Carlos Pérez de la Fuente, director del Teatro Español, que confiesa que «las artes escénicas en España no han actuado con valentía a la hora de reflejar momentos de la vida privada de grandes figuras de la historia». Con este propósito, en concreto, nace el proyecto de «Sofía». No se trata, en ningún caso, de una aproximación en clave de parodia ni de crítica morbosa a la figura de la Reina como el que interpretase Toni Albà en «La familia irreal», o el que representan Willy Toledo y Alberto San Juan sobre la vida de don Juan Carlos. La obra titulada «El rey», escrita y dirigida por el propio San Juan, ha suscitado una gran polémica por su sesgo crítico y combativo con la labor del Rey emérito durante sus años al frente de la Corona. Valora, al contrario que la obra de García May, aspectos públicos y privados de su vida como su fortuna, las relaciones con los distintos gobiernos y sus nexos de unión con el franquismo.

«Se trata de hacer algo radicalmente opuesto», apunta el director del Español, «de producir una obra en la misma línea que trabajaron los ingleses en “The Queen”». «¿Los españoles no podemos hacer eso»?, se pregunta Pérez de la Fuente. «Sí, claro que podemos», responde. Es esto precisamente lo que se encargó al director de la obra al preguntarle por el proyecto: un acercamiento shakesperiano a la humanidad de Doña Sofía. De hecho, en alguna ocasión, cuando se ha preguntado a la Reina Sofía sobre este tipo de iniciativas artísticas, siempre se ha mostrado del lado de los que opinan que es necesario acercar a estas figuras a la ciudadanía, recuerda. Aunque no han solicitado aún ninguna audiencia con la Reina, desde el equipo de la obra han confesado que les encantaría poder disfrutar de la compañía de Doña Sofía en el estreno y conocer su opinión.