Cásting de actores para aplaudir a Carmena

Uno de los aplausos más sonados de los Goya fue para la alcaldesa. Se lo brindó el presentador, Dani Rovira. ¿Dónde está el secreto para que el mundo del cine cierre filas en torno a la alcaldesa?

La presencia de Manuela Carmena en la gala de los Goya, celebrada el pasado sábado, no pasó desapercibida para nadie. Fue una noche plagada de representantes políticos, en la que estaban desde el presidente del Congreso, Patxi López, el ministro del sector, Íñigo Méndez de Vigo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y hasta tres «presidenciables»: Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Albert Rivera. Pero la alcaldesa de Madrid, a quien ese mismo día le acababa de estallar el escándalo de los titiriteros del Carnaval, fue la más nombrada y saludada por el presentador de la gala, Dani Rovira,desde el escenario. Y es que Carmena no es ajena al mundo del cine. Al margen de sus gustos como aficionada, conoce la profesión desde dentro gracias a su hija, Eva Leira, una de las directoras de cásting más reconocidas de nuestra industria. Dani Rovira –a quien la Academia ha confiado las dos últimas galas y actor de moda gracias a «Ocho apellidos vascos» y «Ocho apellidos catalanes»– es uno de sus «descubrimientos».

Manuela Carmena y Eduardo Leira se casaron en 1967 y fue Jesús Aguirre, que luego se convirtió en duque de Alba, quien ofició la boda. Eran años en los que una boda civil en España era impensable, y el jesuita, uno de los sacerdotes más progresistas de la época, cura de la Complutense, celebró una boda rápida y lo más laica posible dentro de que tenía que ser religiosa. Tuvieron dos hijos, Manuel, arquitecto como su padre, y Eva, que estudió Ciencias de la Información en la Complutense de Madrid. Ya desde esos años de facultad, Eva se volcó en el mundo del cine, en el que hoy brilla con luz propia junto a su socia, Yolanda Serrano, como una de las directoras de cásting más importantes de España. Si no la que más.

Comenzó muy pronto a trabajar en la Agencia 2001 en labores de figuración. Quienes trataron con ella en esos inicios sólo hablan maravillas de su buen hacer profesional, sobre todo, teniendo en cuenta lo complicado que es manejar la figuración en películas en las que se mueven más de 4.000 personas: «Sus fichas eran estupendas –nos dice hoy un ayudante de dirección–. Es más, recuerdo que otra persona, que no quiero nombrar, en una película me dio unas fichas que eran las mismas que Eva me había dado en otro rodaje anterior. ¡Muy fuerte! Enseguida dejó la figuración para empezar a coordinar «figuración especial» y «personajes de pequeños papeles», que es muy complicado, pues el límite legal que separa a esos actores con los que tienen diálogo es confuso. Lleva en el mundo del cine 20 años y sigue siendo un gustazo trabajar con ella», continúa. En esa época conoció a su marido, Rómulo Aguillaume –realizador, que aunque sigue vinculado al mundo del cine y la televisión, ahora se dedica más a la publicidad– con quien tiene dos hijos.

- Las chicas de moda

Hoy se ha confirmado lo que ya intuía esta fuente que nos cuenta sus inicios profesionales: Eva y su socia son las chicas de moda del cine español. Y son inseparables. Nadie habla de ellas de forma independiente y han constituido una sólida pareja indisociable. Jesús Castro (protagonista de «El Niño»), Jesús Carroza (Goya en 2005 al Mejor Actor Revelación por «7 vírgenes») o Nerea Barros (Goya en 2015 como Actriz Revelación por «La isla mínima») son algunos de sus descubrimientos. Podríamos decir que el Goya al Mejor Actor o Actriz Revelación es para este tándem de profesionales, responsables también del reparto de «Julieta», la nueva película de Almodóvar que está a punto de estrenarse con Emma Suárez, Adriana Ugarte, Michelle Jenner o Inma Cuesta como protagonistas. Caso aparte es Dani Rovira, la estrella más solicitada del momento que, desde el escenario de los Goya dijo varias veces «Gracias Manuela», quién sabe si por querer corresponder a la alcaldesa su presencia en la gala apoyando así la gran noche del cine español, o esas palabras escondían una amistad más profunda...

Eva Leira y Yolanda Serrano trabajan muchísimo con Lazona, una productora de cine y teatro vinculada a Telecinco, y responsable de algunas de las películas que más han sonado en los últimos años como las dos entregas de los «8 apellidos». En su currículo figuran títulos como «Lo imposible» (Naomi Watts y Ewan McGregor), «La flaqueza del bolchevique» (Luis Tosar, Mar Regueras, María Valverde), «Ismael» (Belén Rueda, Mario Casas), «Combustión» (Álex González, Adriana Ugarte, Alberto Ammann) o «Biutiful» (Javier Bardem). Tienen pendiente de estreno «Plan de fuga», con Luis Tosar y Alba Galocha, una de las modelos que pisa más fuerte en las pasarelas internacionales, y a la que esperan convertir en una estrella de cine. Es su última apuesta.

«Meter la cabeza con Almodóvar es posicionarse muy fuerte», nos dice ahora un director de largometrajes debutante: «Trabajan muy bien. Cuidan muchísimo a su gente, a muerte, hasta el final, porque creen en sus apuestas. Si eres actor, es imprescindible llevarte bien con ellas. Tienen mucho poder». Quizá por eso las pocas voces negativas que se oyen en su contra proceden de aquellos que no han logrado colarse en sus filas, o de aquellos que han podido sentirse desplazados de la primera posición. «Los directores de cásting tienen que aguantar a muchos pesados, esa es la verdad. Por eso nunca se sabe quién está en lo cierto. Una persona me contó que, en una ocasión, se saltaron al director de la película y hablaron directamente con el productor para que contrataran a una actriz. Pero eso me lo contó una persona a la que se lo había dicho otra..., no el supuestamente ninguneado. Quién sabe si será verdad...». Precisamente por lo pequeño que es este mundillo, nadie quiere dar su nombre para que no suene ni a peloteo ni a posible rencor. Un importante representante de actores se reafirma en lo que ya nos han dicho los técnicos y nos confirma esa gestión hecha a través del productor sin contar con el director: «Pocos directores de cásting luchan como ellas por un actor, pero claro, si no les gustas, no existes. Acaparan mucho, tienen demasiado. Eso sí, no siempre se acierta y aunque suelen tener muy buen ojo, eso limita mucho a que podamos ofrecerles personas que no son las que ellas tienen en mente, por lo que no dan opciones a los productores y representantes. Tampoco se peinan los teatros buscando caras nuevas, no te digo ya en los off, sino las salas comerciales. Sus famosas caras nuevas las buscan en otros sitios, como ocurrió con Jesús Castro».

- Todo bajo control

En este púzle informativo nos falta la opinión de una actriz, fundamental si hablamos de una persona que decide quién va a posibilitar su contratación. También prefiere mantener el anonimato: «Cada uno ve la fiesta según le va. Son muy apasionadas de su trabajo. Conocerlas me ha reconciliado con la profesión. No se casan con nadie y van a muerte con el proyecto. Y eso de que no van a teatros... ¡Vamos, hasta los microteatros controlan! Yolanda ha sido actriz y hace también de ‘‘coach’’ con nosotras. Eva lleva el otro papel. No creo que si Dani Rovira diera las gracias a Carmena sea por ella. Eva sabe separar muy bien las cosas. Yo, que soy amiga, de hecho ni conozco a Manuela, como tampoco conozco a la madre de Luis San Narciso con el que sí trabajo». Sobre si cree que alguna vez la contratará para una película nos dice: «He hecho pruebas con ellas en las que no me han cogido y otras en las que sí, pero finalmente el productor es quien decidió y me apeó del proyecto. Las cosas no son tan simples», zanja rotunda la intérprete.