Barcelona

CiU inicia conversaciones para echar a Colau sin los apoyos necesarios

ERC se desentiende de pactar con PP y Ciudadanos. El PSC descarta sumarse a la oposición

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, apostó ayer por establecer dinámicas compartidas de trabajo con otras ciudades
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, apostó ayer por establecer dinámicas compartidas de trabajo con otras ciudadeslarazon

ERC se desentiende de pactar con PP y Ciudadanos. El PSC descarta sumarse a la oposición.

La difícil moción de censura a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, comenzó a caminar ayer de la mano de CiU, su portavoz municipal, Joaquim Forn, explicó que la semana próxima comenzarán las conversaciones con el resto de fuerzas políticas pese a la complicada aritmética. Se hace imprescindible el concurso de cuatro partidos y ERC no quiere ni oír hablar de sentarse en una mesa con PP y Ciudadanos.

Forn, en cualquier caso, explicó que quieren abrir diálogo con «todos los grupos excepto BComú», al que aspiran a arrebatar la alcaldía. El portavoz de CiU admitió que la moción de censura es prácticamente, por lo que también explorarán «acuerdos en materias que nos unan y que son prioritarias para Barcelona» con el objetivo de marcar la acción de gobierno. «Hay un margen de entendimiento importante, que no sólo pasa por la moción de censura», explicó Forn, quien precisó que no tienen prisa, obviamente, en llegar a este escenario. El presidente municipal de ERC, Alfred Bosch, sin embargo, no dejó demasiada alternativa. Bosch se mostró nuevamente dispuesto a hablar con CiU «básicamente de Barcelona», y les instó a decir con qué grupos pretenden pactar. «Queremos que CiU nos explique claramente si tienen previsto pactar con el PP y Ciudadanos», dijo Bosch. Algo que no piensan hacer. ERC, en cualquier caso, parece más interesada en presionar a Colau para desencallar los presupuestos de la Generalitat a cambio de los de Barcelona para poder desembarazarse de la exigencias de la CUP en el Parlament.

Desde el PP, Alberto Fernández señaló que el papel del PSC en esta operación es «imprescindible» y reclamó renuncias a todos los partidos que participen. «O todos hacen renuncias por el bien de Barcelona para definir una alternativa a Ada Colau o no será», sentenció.

Por parte del gobierno municipal, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, admitió que la propuesta de CiU es «legítima», pero que ve poco recorrido porque fuerza a «acuerdos que parecen incompatibles entre diferentes fuerzas políticas». Pisarello apuntó que la obligación del gobierno es «mantener el diálogo abierto con todos» y que estarán atentos a las conversaciones entre CiU y ERC para ver su contenido. De hecho, la propia Colau se mostró escéptica con la moción de censura en el pasado pleno municipal. La alcaldesa le preguntó a Trias si también negociaría la adhesión de Barcelona a la Asociación de Municipios por la Independencia con PP y Ciudadanos.

En este sentido, el socialista Jaume Collboni afirmó que aceptará «encantado» encontrarse con Joaquim Forn y aseguró que hay que aprovechar «la voluntad de diálogo» pero «no para buscar una alternativa de gobierno».