Cataluña

El Parlament desafía al Constitucional y rechaza acatar la suspensión de Exteriores

El PP avisa de que el TC puede actuar de oficio contra los 96 diputados «rebeldes» y el Gobierno, informar al Ministerio Fiscal

El conseller de Exteriores, en imagen de archivo
El conseller de Exteriores, en imagen de archivolarazon

El Parlament ha rechazado este jueves una moción de C's que instaba al Govern a "acatar y cumplir las resoluciones del Tribunal Constitucional en relación con la acción exterior de la Generalitat"y una segunda del PP que pedía adaptar las competencias de la Conselleria de Exteriores a la providencia del TC

«No es vencido sino quien cree serlo», dicen en «La Celestina». Lo mismo puede decirse de los ganadores. Xavier García Albiol perdió ayer la moción en la que instó al pleno del Parlament a acatar las resoluciones del Tribunal Constitucional (TC) sobre la acción exterior de la Generalitat. Este primer punto de la moción, sólo obtuvo el voto favorable de Ciutadans. Pero el segundo punto no contó ni con el apoyo de los de Albert Rivera, que se abstuvieron porque entienden que no corresponde a un parlamento pronunciarse sobre una resolución judicial. Este enunciado iba más allá y proponía la supresión de la Secretaría de Asuntos Exteriores.

Sin embargo, Albiol no pretendía salir airoso de la votación. Sólo quería que los diputados, el president de la Generalitat y su equipo de gobierno quedaran retratados. Quería pruebas para demostrar al Constitucional que Puigdemont, sus consellers y «98 diputados catalanes» rechazan acatar la decisión de Exteriores de suspender algunas competencias de la conselleria de Exteriores.

Parte de las atribuciones de la conselleria de Exteriores, que lidera Raül Romeva, están suspendidas de forma cautelar hasta que el TC resuelva el recurso que ha presentado el Gobierno en funciones de Mariano Rajoy por conflicto de competencias.

Antes de la votación, Albiol avisó de que postularse en contra de su moción podía tener «importantes consecuencias legales». «¡Sería un escándalo de magnitudes inimaginables que el Govern vote en contra de la resolución de un tribunal!», exclamó. Pero sus palabras no amilanaron a Puigdemont, sus consellers y otros 96 diputados. El PP no trasladará el resultado de la votación al Gobierno, como dijo, porque como grupo parlamentario no puede hacer nada. Pero el Tribunal Constitucional puede actuar de oficio. Y el Gobierno puede trasladar el resultado al Ministerio Fiscal.

El diputado que habló en nombre de Junts pel Sí, Jordi Sendra, reprochó a Albiol que tenga «el coraje de venir aquí a amenazarnos como si fuera el acto ejecutor del Tribunal Constitucional». Tanto Junts pel Sí como la CUP denunciaron que el Alto Tribunal se somete a los intereses del Gobierno. «Más del 80 por ciento de los casos se resuelven a favor del Gobierno», señaló la diputada de la CUP, Anna Gabriel, tras recordar los «sainetes» que ha protagonizado un Alto Tribunal que «tarda más de tres años para nombrar magistrados» o que «tiene un presidente que oculta la militancia a un determinado partido (el PP)».

El diputado de Junts pel Sí defendió el sentido de su voto alegando que el TC ha fallado sentencias a favor de la Generalitat como las devoluciones del 0,7 por ciento del IRPF a las ONG o las de la Disposición Tercera del Estatut que no se han obligado a cumplir.

El Parlament cerró filas en torno a Romeva, amparando su departamento, mientras el TC dijo que escuchará a la Generalitat antes de decidir si lo ha desobedecido o no. Y aunque Albiol no buscaba una victoria sí dijo estar sorprendido con la abstención del PSC. «A ver si entienden de una vez por todas que a los que no somos independentistas estos señores (soberanistas) nos están chuleando», reprochó a los socialistas. Para el PSC el debate era innecesario e igual que Ciutadans defendió que la Generalitat despliegue su acción exterior, aunque no para conseguir el objetivo de la independencia. Para evitar malentendidos Ciutadans presentó una moción para fijar competencias entre el Estado y las Comunidades en materia exterior, pero no salió adelante.

El próximo jueves, el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, hará su primer viaje al extranjero a París, donde pronunciará una conferencia sobre el futuro de Cataluña. Será en la Science Po, uno de los principales centro de estudios políticos de la capital francesa. El ex primer ministro italiano, Enricco Letta, presentará la conferencia sobre el momento político que vive Cataluña, que lleva por título: «Cuál es el futuro para Cataluña dentro de Europa». Al margen de la acción diplomática, en materia de cooperación, envió una carta a la UE donde explica que Cataluña trabaja para acoger a 4.500 refugiados y que puede acoger desde ya a 1.800. Por su parte, Raül Romeva reclamó al ministro García Margallo que agilice los trámites para acogida.