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Aguirre deja en evidencia a Carmena por su «rueda de prensa antidemocrática»

La alcaldesa abandonó el Pleno junto a la portavoz del PSOE tras convocar a los medios en mitad del debate para informar de la oficina antifraude. El PP acudió a la sala de prensa como protesta

Aguirre y Henríquez de Luna, junto a otros concejales del PP, en la rueda de prensa convocada por Ahora Madrid y el PSOE
Aguirre y Henríquez de Luna, junto a otros concejales del PP, en la rueda de prensa convocada por Ahora Madrid y el PSOElarazon

La alcaldesa abandonó el Pleno junto a la portavoz del PSOE tras convocar a los medios en mitad del debate para informar de la oficina antifraude. El PP acudió a la sala de prensa como protesta

En la mañana de ayer, el Pleno del Ayuntamiento de la capital fue el escenario de un hecho insólito. La alcaldesa, Manuela Carmena, decidió ausentarse de la sesión ordinaria –sólo se celebra una al mes– para dar una rueda de Prensa. A las 9:15 comenzó el Pleno y los medios de comunicación estaban convocados a las 10:30 en una sala situada tres plantas más arriba. El motivo de esta comparecencia ante los medios era presentar junto a la portavoz del PSOE, Purificación Causapié, que también dejó su asiento en el Palacio de Cibeles, la nueva Oficina contra el fraude y la corrupción. Minutos antes de la rueda de prensa, Carmena informaba dentro del Pleno sobre el borrador que Ahora Madrid y el PSOE han confeccionado para articular esta oficina. Un borrador que fue facilitado al PP y a Ciudadanos con tan sólo unas horas de antelación para su estudio y posterior debate. Una circunstancia que tanto Esperanza Aguirre (PP) como Begoña Villacís (Ciudadanos) criticaron duramente.

Poco después de las 10:30 horas de la mañana, Causapié abandonó el Pleno rumbo a la sala de prensa. Veinte minutos después, Carmena seguía sus pasos y el tercer teniente de alcalde, Mauricio Valiente, se vió obligado a ocupar su puesto en la Presidencia del Pleno.

Minutos antes, con Carmena presente, Esperanza Aguirre afeó a la regidora esta convocatoria: «Es una vergüenza que convoque una rueda de prensa para explicar algo que no ha entregado a los grupos de la oposición». La portavoz de los populares no dudó en calificar este hecho como una «maniobra de distracción» para, de esta manera, evitar las críticas de la sesión de control que se estaba celebrando: «Usted ya no es jueza, es alcaldesa, y debe acostumbrarse a las críticas de la oposición. Es intolerable que convoque una rueda de prensa para no escuchar las críticas».

Tras la salida de Carmena del salón de Plenos, la bancada popular quiso hacer patente su disconformidad con lo que consideraron un menosprecio a los representantes de los madrileños. Para expresar este malestar, Esperanza Aguirre y el PP en pleno –con excepción del concejal José Luis Martínez Almeida, que se ha quedado para representar al grupo en las comparecencias que seguían su curso– acompañaron a Carmena y a Causapié. De pie, en los laterales de la sala de Prensa, Aguirre y el resto de ediles presenciaron al completo la presentación de la oficina contra el fraude a los medios. Fuentes del PP señalan que había decidido irse del Pleno como «forma de protesta». Durante esta comparecencia, Carmena ha señalado que esta circunstancia –la convocatoria de una rueda de prensa en mitad de un Pleno– no volverá a producirse. A la salida, Aguirre aplaudió estas palabras de la alcaldesa y responsabilizó de lo ocurrido a la portavoz del PSOE: «Causapié no tiene manera de tener un espacio mediático, y por ello ha arrastrado a la alcaldesa de Madrid, para tener una rueda de prensa en el mismo momento del Pleno».

En lo que respecta al fondo del debate, tanto PP como Ciudadanos criticaron especialmente que la nueva oficina antifraude tenga dependencia política al estar vinculada al Pleno. El presidente de esta oficina será elegido por un periodo de cinco años. El nombramiento deberá ser aprobado por tres quintos de la cámara en primera votación o por mayoría simple en segunda, tras superar una entrevista en la comisión de Transparencia. Tendrá cinco vocales asesores, que, a su vez, deberán contar con el visto bueno del director.