Carmena bloquea la construcción de un centro de salud en un solar okupado

El expediente continúa paralizado en el Ayuntamiento siete meses después de que un informe municipal avalara el proyecto sanitario para la parcela ocupada por el Patio.

En el corazón del distrito Centro, en el número 8 de la calle Antonio Grilo, un solar de casi 500 metros cuadrados está llamado a albergar un nuevo centro de salud para los vecinos del barrio de Universidad. Su reconversión en dotación sanitaria depende únicamente de la voluntad del Gobierno de Carmena. Que el Patio Maravillas ocupe desde hace años este recinto municipal podría, sin embargo, terminar malogrando esta vieja reivindicación vecinal. El proyecto comenzó a gestarse hace más de dos años: en diciembre de 2014, la Comunidad de Madrid planteó al Ayuntamiento de la capital la posibilidad de firmar un convenio que permitiese la cesión gratuita del suelo para que el Gobierno regional asumiera la construcción y puesta en marcha del centro sanitario. El Gobierno de Ana Botella (PP) apoyó entonces la iniciativa. Con la llegada de Ahora Madrid al Palacio de Cibeles, el convenio continuó su tramitación. El 19 de julio de 2016, la Intervención General del consistorio y la Unidad Técnica de Ingresos Patrimoniales firmaron un informe favorable a la cesión del suelo a la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Este documento, al que ha tenido acceso este diario, señala que la parcela se cederá durante 75 años y que requerirá la aprobación de un Plan Especial.

Sin embargo, siete meses después de que el propio Ayuntamiento elaborase este informe, no hay novedad alguna sobre el proyecto. Y es que el enclave en el que podría edificarse el centro de salud no es un solar cualquiera. Actualmente, estos 486 metros cuadrados de suelo municipal están ocupados por el Patio Maravillas. Este espacio –rebautizado como «Solar de Antonio Grilo-Solar Maravillas»– es utilizado por el colectivo okupa para realizar sus propias actividades.

Tras estos siete meses de retraso en la tramitación del centro de salud, el PP llevará hoy esta cuestión al pleno de la junta de distrito de Centro. Fuentes populares apuntan a que «el informe duerme el sueño de los justos en algún cajón olvidado» del área de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento. «Carmena prefiere contentar al Patio Maravillas antes de que los madrileños que viven el distrito Centro disfruten de este equipamiento público de primera necesidad», aseguran desde el grupo municipal que preside Esperanza Aguirre. En el pleno de distrito de hoy, el PP solicitará al área del delegado José Manuel Calvo que haga efectiva la cesión gratuita de la parcela para iniciar la construcción del centro de salud.

Este diario preguntó ayer al área de Desarrollo Urbano Sostenible por el estado en el que se encuentra la tramitación del convenio sin obtener respuesta al cierre de esta edición. Fuentes de la Consejería de Sanidad, por su parte, señalan que este proyecto es «una prioridad absoluta» y que el departamento continuará trabajando para agilizar su tramitación. Los planes del Gobierno regional pasan por que el futuro centro de salud de la calle Antonio Grilo sustituya al que actualmente se encuentra en el número 59 de la calle de la Palma.

Vecinos frente a okupas

A pie de calle, la creación de este centro de salud es algo que llevan reclamando muchos años los vecinos, ya que el más cercano que tienen está en la calle Acuerdo y éste, a juicio de sus usuarios, es «demasiado pequeño para cubrir las necesidades de todos los que vivimos aquí», afirmaba ayer un residente. Los responsables de los comercios y establecimientos de la zona aseguran que entre semana el solar está deshabitado y únicamente un hombre de unos 60 años que vive en el bajo del edificio de al lado –con «aspecto desaliñado y siempre con una lata de cerveza en la mano»– se encarga de mantener el espacio «más o menos cuidado». Otro comerciante de la zona reconoce haber tenido una pequeña discusión con él por apropiarse del cubo de basura que utilizan en su restaurante. Pero no es el único que se queja del mal uso de esta parcela: algunos vecinos de la Calle Antonio Grilo lamentan que sea habitual durante los fines de semana que haya «mucho follón y alguna que otra pelea dentro de la parcela». Según relatan quienes pasan a diario por esta calle, el espacio de unos 500 metros cuadrados es utilizado para actividades como la proyección de películas los fines de semana de verano o para la venta de alimentos de un huerto ecológico que los mismos okupas han creado dentro del espacio, abierto todos los sábados por la mañana.

Por su parte, los okupas del Patio Maravillas que llevan nueve años apropiándose de varios edificios de la ciudad, reivindicaron su derecho a permanecer allí e hicieron, en el pasado mes de diciembre, dos manifestaciones pidiendo al consistorio que el centro de salud se creara en otro edificio vacío, propiedad de la Comunidad, en la Calle San Bernardo.

De hecho, el verano pasado, al trascender que los servicios técnicos municipales daban vía libre a la construcción del centro de salud, el colectivo del Patio Maravillas criticó duramente la posición del Gobierno de Ahora Madrid. Los caminos del Ejecutivo de Carmena y del Patio Maravillas vuelven a cruzarse, ahora en relación a este proyecto. En el pleno del mes de enero, el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible retiró a última hora del orden del día una propuesta del propio Gobierno para convertir el edificio de Divino Pastor número 9 –antigua sede del Patio Maravillas– en apartamentos turísticos. La presión del colectivo okupa y el rechazo de Ganemos al expediente urbanístico forzaron a Ahora Madrid a posponer el debate y votación de la iniciativa. Calvo prometió entonces volver a llevar la reconversión del edificio de Divino Pastor en apartamentos turísticos al pleno de este mes.