Comunidad de Madrid
El dueño de Vitaldent iba a vender la empresa a un grupo americano
La empresa obtuvo un préstamo de 100 millones que tenía que devolver en el primer cuatrimestre y por eso quería vender la compañía. Además del dueño, fueron detenidas otras 12 personas en la operación, que se inició tras la denuncia de unos socios
>Ernesto Colman y otros 12 cargos fueron detenidos por fraude fiscal y blanqueo. > La estafa a sus franquicias podría superar los diez millones de euros. >«McDentist» se había comprado un pueblo en Lérida y lavaba su fortuna con purasangres
Eran las siete de la mañana cuando agentes de la Policía Nacional entraban en una de las casas del dueño y fundador de Vitaldent –Ernesto Ramón Colman Mena– en Majadahonda y era detenido por fraude fiscal y blanqueo de capitales dentro de la «operación Topolino». Al igual que los dientes se ponen pieza a pieza, los miembros de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF ) habían estado siguiendo cada uno de sus pasos tras las denuncias interpuestas por varios franquiciados, según las primeras pesquisas, aunque como ha podido saber LA RAZÓN los primeros datos sobre las presuntas irregularidades en Vitaldent se obtuvieron cuando algunos socios observaron que otros miembros de la cúpula de la empresa estaban detrayendo de las cuentas bancarias de la entidad cantidades de dinero no justificables y que, según se comprobó después, eran para cubrir gastos de carácter personal. Por otro lado, a los franquiciados les empezaba a extrañar que Colman declarase menos dinero que el que recibía. Y es que parte de las sumas que cobraban a estos inversores (se habla de un 10% y de 10 millones de euros, según Europa Press) les exigía que se lo pagasen en metálico, aunque, como ha podido saber este diario por otros franquiciados, no era la fórmula que se utilizaba de forma general.
Las denuncias pusieron sobre la pista a los agentes, que pronto se percataron de demasiados «desvíos de capital a Suiza y a Luxemburgo», según los datos facilitados ayer por la Policía Nacional. El dinero en b luego se blanqueaba con la compra de numerosos caballos purasangre y fincas. Y es precisamente éste el rastro que van a investigar ahora con el fin de poder averiguar cuántos millones ha defraudado el dueño de la firma. Durante las pesquisas, se ha constatado que algunos de los ahora detenidos realizaban con los franquiciados presuntas prácticas de usura, como obligarles a pedir créditos en los bancos en los que ellos tenían sus cuentas, así como en lo relativo a la compra de material, aunque sí que descartan que fuera defectuoso. El principal proveedor de Vitaldent es un compañía española, con sede en Zaragoza, que se llama Proclínic y que ofrece material a numerosas clínicas dentales.
Pero los problemas financieros de la compañía que creó Colman en los años 90 no son nuevos. La deuda se le ha ido acumulando a lo largo de los últimos años por los intentos de expansión de la empresa que, tras su incursión en el mercado estadounidense –llegó a abrir un par de clínicas en Nueva York–, tuvo que abandonarlo cuatro años después por problemas de fiscalidad y un cúmulo de reclamaciones. Portugal fue su siguiente parada y hace dos años que también se tuvo que desprender de ellas. Parecía que Italia, donde tiene cerca de un centenar, era el único país donde el negocio marchaba gracias al trabajo de su mano derecha, el vicepresidente que permanece detenido junto a Colman, Bartolo Conte, de origen siciliano. Una de las claves de todo el entramado, de ahí que la UDEF haya decidido poner el nombre de «Topolino» a la operación. El negocio no iba bien, por eso tuvieron que acudir en 2013 a un fondo de Luxemburgo, Intermediate Capital Group (ICG), para obtener nueva financiación. Les aportaron cien millones de euros no sólo para ayudarles en sus «apuros» en Italia y España, sino también para apoyar su expansión en Polonia, donde adquirieron dos centros. Colman tenía un margen de tres años para cumplir con los plazos de devolución de la deuda y sus correspondientes intereses. Como ha podido saber LA RAZÓN, Colman no estaba cumpliendo y en el primer cuatrimestre de este año la deuda se iba a ejecutar. El uruguayo se iba a quedar sin su empresa y no estaba dispuesto a quedarse sin nada. Por ello, ya tenía acordada la compra de la empresa por un grupo americano y, así, no se quedaba sin nada.
Durante el día de ayer los agentes arrestaron a 13 personas en total y practicaron 15 registros en las oficinas centrales de la empresa, en la compañía del vicepresidente, Negocio y Comunicación, en tres despachos de abogados y en los domicilios de los detenidos. Entre los arrestados, «hay dos mujeres» que a la Policía «no nos consta que tengan lazos familiares con el presidente del grupo dental», añadieron a este periódico. Una de las detenidas, como confirman fuentes cercanas a la empresa, es Yolanda Copete, directora de expansión de Vitaldent.
Al cierre de esta edición, «algunos de los 13 arrestados van a quedar en libertad. El resto, entre ellos el presidente de Vitaldent, dormirán esta noche en los calabozos de Moratalaz y está previsto que Colman pase mañana a disposición judicial, aunque podría ser que se agote el plazo de 72 horas».
Durante la operación, se ha decretado la prohibición de disponer de 124 fincas, así como de 36 vehículos y una aeronave. También se ha previsto el bloqueo de los saldos de las personas físicas y jurídicas objeto de la investigación repartidos en 25 entidades financieras, así como el bloqueo de los activos financieros de dos Sicav por un importe de cinco millones de euros, y la prohibición de disponer de otras 103 fincas rústicas.
La investigación, que continúa abierta y podría durar meses, ya que falta tejer toda la madeja de empresas, y blanqueo de capitales, ha sido iniciada por la UDEF y está dirigida por la Fiscalía Especial Contra la corrupción y la Criminalidad Organizada y por el Juzgado de Instrucción nº dos de Majadahonda.
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