Asturias

Fallece el piloto de un helicóptero antiincendios

Un helicóptero realiza labores de extinción de un incendio forestal
Un helicóptero realiza labores de extinción de un incendio forestallarazon

Es el mismo que llevaba el aparato del accidente de Rajoy y Aguirre. La tragedia ocurrió en Asturias.

La oleada de incendios que se inició el pasado fin de semana y que amenaza las zonas forestales del norte de España se cobró ayer su primera víctima. José Antonio Rodríguez, piloto del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), falleció ayer al estrellarse el helicóptero que manejaba mientras realizaba labores de extinción en el concejo asturiano de Parres. El aparato, en el que sólo se encontraba la víctima, se precipitó contra el suelo en La Cuesta de Parres, una zona difícil acceso cercana a la aldea de La Roza.

Rodríguez, de 49 años, era trabajador de una Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Coyotair y Taf y subcontratada por el SEPA para disponer de medios aéreos en la lucha contra incendios y llevar a cabo tareas de rescate y salvamento. Natural de Madrid aunque residente en Menorca, Rodríguez «era un piloto experimentado que ya había trabajado en Asturias», según señaló el SEPA en un comunicado. Además, estuvo a los mandos del helicóptero que en 2005 se accidentó con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, a bordo. Ayer partió del aeródromo de La Morgal antes del mediodía para colaborar en la extinción de los dos incendios que se encontraban activos en la comarca durante el día de ayer.

El aviso del accidente se dio pasada la una de la tarde y en él se informaba de que uno de los dos helicópteros del SEPA que estaba trabajando sobre la zona había caído y que, tras el choque, había empezado a arder. Hacia el lugar de los hechos se movilizaron un helicóptero medicalizado, una UVI móvil y una unidad de la Guardia Civil. Media hora después del aviso los efectivos pudieron acceder por aire al punto del accidente, si bien por vía terrestre el punto del impacto se encuentra a unos dos kilómetros y medio de la pista para vehículos más cercana. Hacia las seis de la tarde el cuerpo fue llevado al Instituto de Medicina Legal de Oviedo para que pudiera proseguir la investigación sobre lo sucedido.

El presidente de la región, Javier Fernández, se personó en la zona en la que se produjo el suceso y desde allí expresó su agradecimiento al malogrado piloto «por el trabajo que realizaba» así como su «dolor y solidaridad» con los familiares del fallecido. Tras hablar con algunos de los miembros del equipo de rescate que llevaron a cabo la operación de recuperación y levantamiento del cadáver, Fernández consideró la opción de que el siniestro pudo deberse a la escasa visibilidad debido a la presencia de humo y niebla sobre el lugar en el que estaba actuando el helicóptero, lo que propició el impacto final contra una ladera. Sin embargo, aún sigue abierta la investigación.

Últimos coletazos

El presidente asturiano también hizo referencia a la «plaga» de incendios que han quemado múltiples parajes de la región en los últimos días. Así, mientras que el domingo hasta 147 focos llegaron a estar activos en territorio asturiano, ayer a media tarde aún se mantenían ocho frentes. Salvo el de La Roza, los demás ya estaban controlados de manera que en la pasada jornada únicamente se procedió a enfriar el perímetro y la zona quemada. Un total de 111 efectivos entre bomberos, agentes de Medio Natural y empresas forestales se encargaron de esta tarea. Asimismo, la Guardia Civil, junto con el Seprona Central y otros organismos autonómicos, han iniciado las investigaciones para conocer las causas que motivaron los incendios de la región, una labor que centra mayores esfuerzos en determinar el punto exacto del inicio del fuego.

Por su parte, Cantabria mantiene la alerta por riesgo de incendios por las altas temperaturas y el viento que sopla del sur. El Gobierno regional anunció ayer que todos los fuegos de la región ya estaban controlados, si bien a lo largo del día llegó a haber hasta diez frentes activos. A última hora de la tarde la cifra se redujo a tres, de forma que, ya sin peligro, dos focos afectaban a Vega de Pas y otro al municipio de Soba.