La Policía Nacional intercepta un pesquero venezolano con 2.500 kilos de cocaína

El Cuerpo Nacional de Policía y la Agencia Tributaria han conducido al pesquero y a sus siete tripulantes, todos ellos venezolanos, a la base de la Armada en Las Palmas de Gran Canaria, donde se han descargado los fardos de cocaína.

Un barco con 2.500 kilos de cocaína a bordo ha sido interceptado por agentes de la Policía Nacional, en una operación, con la colaboración de Estados Unidos, Reino Unido y Portugal, en la que han sido detenidas siete personas.

Según ha informado la Jefatura Superior de Policía de Canarias en un comunicado, el buque, de bandera venezolana, fue abordado por agentes de los GEO y de la Agencia Tributaria y ha sido conducido al puerto de Las Palmas de Gran Canaria.

El pesquero venezolano fue interceptado por el buque "Petrel"en aguas de Martinica, el departamento francés situado en el Caribe, según ha informado hoy la delegada del Gobierno en Canarias, Mercedes Roldós.

El Cuerpo Nacional de Policía y la Agencia Tributaria han conducido hoy al pesquero y a sus siete tripulantes, todos ellos venezolanos, a la base de la Armada en Las Palmas de Gran Canaria, donde esta mañana se han descargado los fardos de cocaína que transportaba en sus bodegas, en una operación supervisada por el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional.

La investigación que ha permitido aprehender este importante alijo de cocaína se puso en marcha en enero, con la colaboración del departamento antidrogas de Estados Unidos (la DEA) y las Policías del Reino Unido y Portugal, según han precisado sus responsables.

El pesquero con los 2.400 kilos de cocaína fue localizado en marzo, aunque su abordaje por parte de los agentes embarcados en el buque "Petrel"no se produjo hasta el pasado 4 de mayo.

El comisario general de la Policía Judicial, Eloy Quirós Álvarez, presente en la llegada del pesquero a la base naval de Las Palmas, ha señalado que el refuerzo del control que se ejerce en los puertos europeos parece haber hecho cambiar de estrategia a las mafias del narcotráfico, que vuelven a recurrir a barcos nodriza.