¿Somos empáticos con los animales?

«Empatía», un documental que se estrena mañana en los cines, aborda el sufrimiento al que se somete a los seres sintientes desde el punto de vista de un escéptico.

¿Sómos éticos con los animales? Si fuera una respuesta rápida muchos pensarían que sí, pero lo cierto es que los usamos como meras cosas: máquinas que nos alimentan, que nos divierten, que nos visten, que abandonamos... Ésa es la realidad que muestra el documental «Empatía: Una historia sobre el respeto animal contada por un escéptico», coproducido por la Fundación para el Asesoramiento y Acción en Defensa de los Animales (Faada) y La Diferencia, y distribuida en España por Begin Again Films, que se estrena mañana en los cines.

Ed Antoja, director, productor y guionista del documental, persigue concienciar sobre nuestros hábitos de consumo diario. ¿Cómo? Relatando su particular aproximación a un modo de vida más responsable con respecto a los animales sin mostrar las imágenes que podrían herir la sensibilidad. Para ello, parte de círculos concéntricos, de lo más cercano al ser humano a lo más lejano, que es «cómo se alcanza la compasión, el respecto, la solidaridad», explica a este periódico Mariví Vaquer, psicóloga escolar. Ed empieza primero por los animales de compañía. Más de 100.000 perros fueron recogidos en el año 2015 en la vía pública, según datos de la Fundación Affinity. En otros casos, los dueños que quieren deshacerse de ellos los dejan en protectoras como si fueran «aparcamientos de perros», afirma Ed, o como «vertederos de perros», tal y como el personal de una protectora afirma en la película.

Tras mostrar esta realidad, el documental amplía su ángulo de visión. Y despierta interrogantes en el espectador. ¿Es idóneo llevar a los pequeños al zoo? ¿Es correcto que desde que nos despertamos hasta que nos acostamos estemos consumiendo, sabiendo o no queriendo mirar, productos de origen animal? Y es que «Empatía» refleja un problema de desconocimiento y da las herramientas necesarias para que los más escépticos de la materia aprendan a mirar más allá de los conceptos que todos tenemos asumidos.

¿Es ético que un pollo viva en un espacio del tamaño de un folio A4? O una de las cosas que más le impactaron a Ed: «Ordeñar una vaca no es tan natural como creemos». «En la vida no soy escéptico, pero hay un momento del documental –en cuanto al tema vegano– que les digo «tenéis la batalla perdida», aunque esto no va de batallas, sino de tener la información necesaria», explica Ed.

«Han cambiado mis hábitos alimentarios tras realizar este documental porque hay cosas que no tenía ni idea antes de sumergirme en ‘‘Empatía’’, como que la ganadería ecológica no es como yo imaginaba». Y eso que «no me dejaron entrar en ningún matadero y que ninguna granja ecológica nos dejó grabar, en parte creo porque muchas tienen también ganadería intensiva».